Ciudad de México – Con el propósito de fomentar la investigación en torno a las microalgas en los sectores científico, académico e industrial, el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (Cibnor) resguarda una importante colección de cepas que pone a disposición de todas las personas interesadas.
La Colección de Microalgas comenzó a conformarse en 1996 y se constituyó formalmente un año después a iniciativa del doctor Francisco Magallón Barajas, con el propósito de apoyar los trabajos que realizaban en el Programa de Acuicultura y Biotecnología Marina de este centro público de investigación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), para su uso como alimento de moluscos, crustáceos y zooplancton.
Actualmente la colección alberga 168 cepas de ambientes marinos, dulceacuícolas y salobres que pertenecen a los grupos taxonómicos Chlorophyta, Rhodophyta, Eustigmatophyta, Haptophyta, Bacillariophyta, Dinophyta y Cyanobacteria. Además cuenta con cepas comerciales como Spirulina platensis, Haematococcus pluvialis, Phormidium persicinum y Rhodomonas marina.
Esta colección forma parte del cepario del Cibnor que además alberga especies de cianobacterias, dinoflagelados marinos y levaduras marinas; y en el que se realiza el aislamiento, escalamiento y experimentación de dichas cepas.
La doctora María Concepción Lora Vilchis, responsable académica de la Colección de Microalgas, dice que la colección tiene como propósito mantener, incrementar, intercambiar y evaluar cepas vivas de microalgas, así como contribuir a la realización de investigaciones sobre diferentes aspectos de su caracterización taxonómica, biología, cultivo y aplicaciones biotecnológicas.
En sus inicios, bajo la dirección de la doctora Bertha Arredondo Vega, albergó 56 cepas dulceacuícolas y marinas —tanto regionales como nacionales—, las cuales fueron mantenidas hasta 2004; desde 2007 a la fecha, el técnico responsable es el químico Marte Virgen Félix.
Durante los últimos años, la colección ha crecido debido a que en 2013 se recibieron recursos de la convocatoria Sener-Conacyt-Sustentabilidad Energética para el aislamiento de cepas regionales con alto potencial productor de lípidos.
Las cepas que resguardan están identificadas taxonómicamente y enlistadas en su página de Internet a disposición de los interesados.
Aplicaciones y servicios
En entrevista, la doctora Lora Vilchis señala que las especies que ponen a disposición de la comunidad científica e industrial son independientes a las que trabajan en el interior del Cibnor, de las cuales están vislumbrando posibles aplicaciones.
“Estamos estudiando la respuesta al estrés en diferentes especies de microalgas diatomeas en sus composiciones, estructura y el efecto de cambios de diferentes macronutrientes para —una vez conocida esa respuesta— hacer más eficiente la producción del compuesto o compuestos que deseamos impulsar para una producción biotecnológica”, dice.
Actualmente, realizan experimentos para observar la respuesta de las microalgas a diferentes déficits de nutrientes en torno a su producción de antioxidantes; además de trabajos para la identificación de especies diatomeas para la obtención de alta producción de lípidos, en especial ácidos grasos.
Entre las aplicaciones que analizan destaca la producción de microalgas enfocada en acuicultura y como biofertilizantes. Para ello, estudian diversas especies a nivel laboratorio (en recipientes de 20 y 30 litros), mientras que otras están en estanques al aire libre para seleccionar aquellas que puedan resistir cambios drásticos en esas condiciones de cultivo.
Además, indica la investigadora adscrita al Programa de Acuicultura de Cibnor, a partir de las capacidades de los investigadores y técnicos que trabajan en el cepario, se apoya al sector industrial en el establecimiento y cultivo de esas especies; por ejemplo, en el diseño de una planta de producción de microalgas a empresarios de Sonora; mientras que en el aspecto académico a nivel posgrado organizan los cursos “Biología y cultivo de microalgas” y “Cultivos de apoyo para uso en acuicultura y biotecnología” dirigido a acuicultores a partir de estas especies.
Otros servicios técnicos que se ofrecen son el aislamiento, purificación y mantenimiento de microalgas; su clasificación taxonómica por métodos moleculares y estructurales (microscopía electrónica en el caso de las diatomeas); análisis bioquímicos, determinación de ácidos grasos y pigmentos, así como escalamiento de la experimentación para las áreas de acuicultura y biotecnología, entre otras.
