TIJUANA, Baja California.- El trasiego de drogas y de armas en la frontera representa un gran reto para las autoridades de Estados Unidos y México. Buscan, por medio de la tecnología, atacar el problema que ha afectado por años a los dos países, especialmente la llegada del fentanilo.
Durante su vista por Tijuana, el canciller Marcelo Ebrard y el embajador de los Estados Unidos en México, Ken Salazar, expusieron que dentro de la inversión de infraestructura fronteriza —con un presupuesto de cuatro mil 200 millones de dólares— entra el tema de la seguridad.
“La meta es ser más efectivo en el entendimiento que tenemos contra fentanilo que va; armas que vienen; dinero que va y viene y todo lo que tenga que ver con actividades ilícitas. Vamos a usar las tecnologías para proteger a las personas”, externó Ebrard.
En ese sentido, Ken Salazar expuso que anteriormente los gobiernos no se interesaban en invertir en la frontera. Hoy, gracias a la cooperación de ambos países, es que apuestan por la tecnología.
“Hay muchas cosas que están pasando para darnos esa […] para seguir adelante y ahora no tenemos que estar cortando papel. Por ejemplo, cuando estábamos antes ya que ahora con la tecnología; entonces con la operación entre Estados Unidos de México para usar la tecnología para hacer una frontera moderna está ahora”, destacó Salazar.
Sin embargo, la tecnología no puede suplir a los agentes del CBP. De acuerdo con el antropólogo Víctor Clark, el número de elementos en los puertos de entrada son reducidos, al igual que el número de revisiones, lo que permite fácilmente el trasiego de drogas y de armas.
“En el puerto de entrada de San Ysidro detiene en promedio a 10 personas señalándolas de mulas y el fentanilo a facilitado el cruce de droga porque hoy no es como otras drogas, porque es en un pequeño recipiente y se puede llevar miles de dólares”
En ese sentido puso como ejemplo que diariamente cruzan por las garitas de San Ysidro y de Otay 50 mil vehículos de los cuales mil son revisados solamente, dando 49 mil oportunidades para el trasiego de droga. Sin embargo, dijo que no todos los casos son de personas que están conscientes de lo que transportan en sus unidades; también se encuentran aquellos ciudadanos que son utilizados como mulas ciegas. De acuerdo con Víctor Clark, quien participa como testigo experto en cortes criminales de San Diego, por los menos cinco de cada diez casos son de mulas ciegas.
“En el caso de la mula ciega, yo no tomo un caso de una persona si yo no estoy convencido de que efectivamente es una persona que tiene un patrón de cruce y que en la declaración de la persona aparecen elementos de que efectivamente se trata de una mula ciega”, destacó.
En ese sentido, el cónsul general de México en San Diego, Carlos González Gutiérrez, confirmó que han brindado asesoría jurídica en el consulado a los mexicanos que fueron engañados para transportar droga.
Lamentablemente, los casos de mulas ciegas afectan a ciudadanos que mantienen actividades en ambos lados de la frontera, en Facebook un usuario denunció haber sido víctima.
El hombre refirió en una publicación que después de acudir a un motel en Tijuana detectó horas más tarde un olor extraño en su camioneta, aún así, no le prestó cuidado. Al día siguiente, cuando intentó cruzar la garita San Ysidro, el personal del CBP detectó el olor extraño y fue enviado a inspección secundaria. Ahí fue arrestado el hombre por posesión de droga. La víctima estuvo presa tres semanas hasta que se logró comprobar que era un caso de mula ciega.
En relación a dichos casos y a cómo aplicarán la tecnología en los puertos de entrada para detener el trasiego, el zar antinarcóticos de Estados Unidos, Todd Robinson, reafirmó que es un reto para ambos países.
Con información de Carolina Vázquez
