TIJUANA, Baja California.- Durante los primero meses de la pandemia en la ciudad, las familias tijuanenses realizaron la mayoría de sus compras en los supermercados para llenar sus alacenas, esto dejó a las pequeñas y medianas tiendas de abarrotes con un volumen de ventas tan bajo con el que apenas pudieron mantenerse a flote.
El encargado de una de las cuatro tiendas de abarrotes que están en el fraccionamiento Vista del Valle, declaró que hasta hace unas semanas sus ventas empezaron a recuperarse, ya que sus clientes se adaptaron a la nueva normalidad y regresaron a su establecimiento a surtirse de alimentos de la canasta básica como arroz, frijol, leche, huevos y carnes.
En lo que va de la pandemia, el comerciante señaló que tuvo que cambiar de proveedores que, en un acto abusivo, incrementaron el precio de sus productos, por lo que optó por conseguir mercancía directamente en las centrales de abastos para no afectar la economía de sus clientes.
Puesto que el aumento del dólar encareció los productos que obtiene de proveedores estadounidenses como croquetas, papel aluminio y artículos de limpieza, el encargado de la tienda declaró que los ha tenido que comprar en menor cantidad para poderlos revender al precio que los ofrecía desde antes de la pandemia.
El comerciante agregó que para generar confianza entre sus clientes, aplican los protocolos sanitarios indicados por las autoridades de la salud, como el uso de gel antibacterial a la entrada, portar el cubrebocas dentro del establecimiento y la instalación de una ventana acrílica en el área de caja.
Con información de: Miguel Martínez
