Condenan a cuatro personas por asesinato de alcaldesa de Temixco

CUERNAVACA, Mor. (apro).- La juez de la causa condenó a tres hombres y una mujer por el asesinato de la alcaldesa de Temixco, Gisela Mota Ocampo, ocurrido el pasado 2 de enero, apenas 24 horas después de que tomara posesión del cargo.
De acuerdo con el fallo, Carlos Jonathan, Ángel, Jordán y Nora participaron de manera directa o indirecta en el asesinato de Mota en la sala de su propia casa ubicada en el poblado de Pueblo Viejo, del municipio de Temixco, conurbado al sur de Cuernavaca.
La juez consideró que los elementos presentados por el agente del Ministerio Público adscrito a la Unidad Especializada en la Investigación de los Delitos de Homicidios contra Mujeres y Feminicidios fueron suficientes para emitir una resolución condenatoria.
El próximo viernes 16 se llevará a cabo una audiencia para individualizar a cada uno de los condenados la sentencia.
El otro implicado, en este caso el menor de edad Alexis, recibió una condena de nueve años de prisión en junio pasado. La pena impuesta al joven es la máxima que la justicia para adolescentes prevé para menores infractores.
Gisela Mota Ocampo tomó posesión el 1 de enero pasado. Al día siguiente, pasadas las 7 horas un grupo de jóvenes encapuchados brincó la barda de su casa y de manera violenta entraron a la sala, donde la alcaldesa se encontraba con sus padres, uno de sus hermanos y otros integrantes de la familia.
Con golpes, los matones preguntaron a los presentes: “¿Quién es Gisela? ¿Quién es la diputada?”. La mujer alzó la voz y dijo: “Yo soy Gisela”. En ese momento, uno de los agresores se acercó a la alcaldesa y le disparó. Casi enseguida huyeron sin ocuparse más de la familia.
El padre y el hermano de Gisela salieron de inmediato para alcanzar a los atacantes. Casualmente se toparon con una patrulla del Mando Único de Temixco y pidieron auxilio a sus ocupantes, quienes enfrentaron a los sujetos.
“Me mataron a mi niña. Desde pequeña le gustaba participar. No hacía mal a nadie, sólo quería el bien para su pueblo, para su gente, de la que nunca se olvidó”, recuerda llorando Juanita Ocampo, la madre de Gisela, y asegura que padeció “el dolor más grande” al ser testigo de la ejecución de su hija.
El asesinato provocó una crisis política en la entidad, pero sobre todo en el municipio, donde la familia de la alcaldesa y sus colaboradores tomaron la presidencia municipal para evitar que la suplemente, Irma Camacho, asumiera el cargo.
Incluso realizaron una huelga de hambre en el Congreso local para exigir la revocación de mandato, y una parte de la ciudadanía de Temixco se pronunció por la llegada de Juana Ocampo para sustituir a Gisela, pero eso no ocurrió.
Finalmente Irma Camacho asumió el cargo y otorgó algunas posiciones al grupo político de Gisela Ocampo.