MORELIA, Mich. (apro).- La Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Michoacán, obtuvo una sentencia condenatoria máxima, de 160 años de prisión, para cuatro integrantes de una banda de secuestradores por su responsabilidad penal en el plagio de dos personas ocurrido en 2014, en la región de Tacámbaro.
Una vez que el agente del Ministerio Público analizó las pruebas aportadas tanto en la indagatoria como en el proceso penal, se acreditó la plena responsabilidad de Antonio R., Pedro H., Manuel B. Y Samuel R., en la comisión del delito de secuestro agravado.
Con relación a los hechos, se sabe que estos se registraron en el mes de octubre de 2014 en la región de Tacámbaro, lugar donde una de las víctimas se dedicaba a la agricultura.
El 27 de octubre de ese año, el afectado acompañado de su esposa y de su trabajador Samuel R. se dirigieron a una de sus huertas ubicada en el municipio; sin embargo al llegar fueron interceptados por tres personas cubiertas del rostro y que portaban armas de fuego.
Los presuntos secuestradores amagaron a los patrones de Samuel y a éste para trasladarlos rumbo al cerro donde los mantuvieron privados de su libertad por unas horas.
Posteriormente los plagiarios les indicaron a su cómplice Samuel y la esposa del agricultor que los dejarían en libertad para que reunieran una importante suma monetaria a cambio de la libertad del agricultor.
Por lo que Samuel y la esposa de su patrón regresaron a su domicilio para juntar el dinero solicitado, momento en que el trabajador le indicó a su patrona que uno de los secuestradores le había pedido que le dejara su teléfono celular para estar en comunicación con ella, retirándose Samuel de la casa de sus patrones.
Horas después, los secuestradores comenzaron a negociar con la esposa del plagiario a quien por ultimo acordaron recibirle 150 mil pesos, los cuales debería entregar en un corral de toros que se ubica por el rumbo de las Norias.
La esposa del agricultor se dirigió al lugar a bordo de una unidad de alquiler donde después de bajarse y caminar fue amagada por uno de los plagiarios quien la llevó al lugar de cautiverio de su esposo.
Ahí los secuestradores comenzaron a negociar nuevamente con las víctimas ya que ahora eran los dos que estaban privados de su libertad por lo que les exigían otra suma de dinero.
Las víctimas convencieron a los plagiarios para que los dejaran en libertad y poder reunir la otra suma de dinero, misma que debería ser entregada a su trabajador Samuel para que él se les hiciera llegar.
Después de recuperar su libertad los esposos acudieron ante las autoridades de la PGJE a denunciar los hechos, por lo que durante el trabajo realizado por la Unidad Especializada para el Combate al Secuestro, se logró establecer la identidad de los cuatro integrantes del grupo delictivo, entre ellos el mismo trabajador, por lo que se llevó a cabo la acción operativa que permitió su captura.
Una vez que valoró las pruebas aportadas por el agente del Ministerio Público, el juez de la causa dictó sentencia condenatoria de 160 años de prisión en contra de los detenidos.
