El senador Bonilla enjuició indolencia en Baja California por inseguridad, carencia de agua y desatención a temas urbanos y sociales.
CIUDAD DE MÉXICO.- Durante la sesión de este miércoles, las y los integrantes de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión chocaron al exponer sus puntos de vista en torno a la agenda política dedicada al recuento de acciones del Gobierno Federal. Mientras de un lado se destacaron las magnas obras y el firme combate a la pobreza; del otro se fustigó la falta de servicios de salud y se calificó a este sexenio como “el más violento de la historia de México”.
El senador Jaime Bonilla Valdez, miembro del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (PT), reconoció avances notables a nivel nacional durante la actual administración, como la reducción de la pobreza, el aumento del salario mínimo y la realización de proyectos de infraestructura de gran envergadura como el Tren Maya y el Tren Interurbano. Sin embargo, subrayó que en Baja California persisten desafíos considerables que requieren atención urgente.
En ese sentido, el senador Bonilla enfatizó su preocupación por la situación en Baja California, señalando la presencia de dificultades significativas relacionadas con la seguridad, la escasez de agua y la falta de atención a problemas urbanos y sociales. Al enjuiciar la indolencia en la región, expresó la necesidad de abordar estos problemas de manera efectiva para mejorar las condiciones de vida y el bienestar de la población.
