Desacuerdos entre víctimas y Fiscalía retrasan exhumación en fosa de Tetelcingo

TETELCINGO, Mor. (apro).- A las 6:22 de la mañana de este lunes, familiares de víctimas, integrantes del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, y universitarios de Morelos, iniciaron un ritual religioso previo al inicio de la diligencia para abrir las fosas clandestinas de Tetelcingo y exhumar los más de 100 cuerpos inhumados en 2014.
Sin embargo, los representantes de la Fiscalía General de Morelos y elementos del Mando Único, iniciaron una serie de acciones dilatorias. Primero intentaron tapar la visibilidad del lugar donde se encuentra la fosa, lo que provocó roses y tensiones con los representantes de los medios de comunicación.
En algún momento, un elemento de la Fiscalía y dos agentes del Mando Único jalonearon y empujaron a un corresponsal, provocando revuelo, discusiones y gritos. Unos 300 elementos del Mando Único rodean toda el área del predio El Maguey, donde se ubican las fosas.
Después de varias discusiones, las partes involucradas –la Fiscalía, los representantes de las familias de víctimas y los enlaces institucionales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM)– acordaron que sólo se taparían dos lados de la carpa y se dejarían dos más descubiertos.
Entonces la Fiscalía mandó traer la maquinaria para comenzar la excavación. Sin embargo, esto provocó un nuevo retraso de la diligencia.
Al lugar, llegó un trascabo con restos de barro en la palanca de empuje que se utiliza para excavar. Esto provocó molestia en las víctimas presentes quienes exigieron que la Fiscalía cumpliera el acuerdo de proveer de maquinaria idónea para realizar esta labor, en este caso una máquina que contara con las condiciones de inocuidad y además tuviera cubiertas las puntas para evitar que se causaran daños a los cuerpos.
La molestia ha llegado a tal punto que familiares de víctimas están decididas a abrir las fosas “con sus propias manos”, sin embargo, el rector de la UAEM, Jesús Alejandro Vera Jiménez, se comunicó vía telefónica con el secretario de Gobierno, Matías Quiroz Medina, y con el fiscal Javier Pérez Durón para instarlos a que se presenten en el lugar. A las 11:00, el fiscal se comprometió a asistir “en cuanto fuera posible” a Tetelcingo.
Mientras tanto, el poeta Javier Sicilia entabló comunicación telefónica con el fiscal de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Éber Omar Betanzos, a quien informó de la situación en la zona. El funcionario federal se comprometió a llevar a cabo las llamadas necesarias para agilizar el procedimiento.
Hasta las 11:30 horas, la diligencia que estaba citada para las seis de la mañana todavía no comenzaba y el calor aumenta en Tetelcingo.
Unas 350 personas, entre reporteros, fotógrafos y camarógrafos, así como familiares de víctimas de desaparecidos y personal de las instituciones participantes forman grupos, se cubren del sol bajo algunas carpas o los árboles y no se ve para cuando inicie la diligencia.