Diego del Real acarició la medalla de bronce

El joven mexicano Diego del Real, de apenas 22 años, estuvo a punto de culminar la sorpresa subiendo al podio olímpico en el lanzamiento de martillo de Rio-2016, pero vio escaparse el bronce en el último tramo de la final y fue cuarto.
Diego del Real, que tiene una mejor marca personal y de la temporada de 77,49, tuvo en la pista de Rio un mejor lanzamiento de 76,05 metros, logrado en su tercer intento. En los demás no consiguió pasar de los 74 metros.
Esos más de 76 metros le sirvieron para colocarse durante gran parte de la segunda mitad de la final en el tercer puesto, con un bronce virtual, pero el polaco Wojciech Nowicki alcanzó 77,73 metros en su sexto y último lanzamiento, adelantando al mexicano en la clasificación cuando el azteca casi se sentía medallista.
El oro fue para el tayiko Dilshod Nazarov (78,68 metros) y la plata para el bielorruso Ivan Tsikhan (77,79 metros).
“A este nivel no se acaba hasta que se acaba. El polaco, que venía entre los favoritos a medalla, supo soportar bien la presión en el último intento. En mi caso me tocó ser cuarto”, se resignó Del Real, con gesto serio por lo cerca que lo tuvo.
“Yo lancé con mucha estrategia. El que da primero da dos veces. Me había propuesto conseguir el mejor lanzamiento en uno de los tres primeros, para que ellos, que no me esperaban a mí, a un mexicano, se dieran cuenta de que estaba ahí. Mejoré mi actuación de la ronda clasificatoria. En los últimos tres lanzamientos hoy ya estuve muy cansado”, explicó.
Diego del Real firmó así un debut a lo grande en una competición de máximo nivel, un año después de haber sido sexto en los Juegos Panamericanos de Toronto, con lo que confirma su importante progresión.
“Este año 2016 ha sido un año de saltos para mí. El año que viene será el campeonato del mundo (en agosto en Londres). Ahora me tengo que preparar mejor porque ya no soy de los que buscan, ahora me van a buscar a mí. Allí en Londres, como siempre he dicho, que venga lo que tenga que venir”, indicó.

Football americano

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Allí Del Real, que admitió haberse quedado con “un sabor amargo” este viernes en la final olímpica, espera “poner la vara más alta” y poder subir al podio.
Diego Del Real tuvo unos comienzos en el deporte alejado del lanzamiento de martillo.
De los 5 a los 13 años jugó al football americano. Cuando en 2007 se abrió la convocatoria para los primeros Juegos Olímpicos juveniles, que se disputaron en 2010 en Singapur, un entrenador estaba buscando un futuro lanzador de martillo y el criterio fue encontrar alguien corpulento, con fuerza y rapidez, unas características que Diego del Real reunía y por las que se le ofreció pasar a esa disciplina.
El resto de la historia es la de la progresión espectacular de un joven que estuvo a punto de ser medallista olímpico, en el día en el que México había sumado una plata con María Guadalupe González en los 20 kilómetros marcha.
1994-2016 Agence France-Presse