Cuarenta ex diplomáticos estadounidenses y funcionarios de seguridad nacional instaron en una cartaal secretario de Estado, Rex Tillerson, a no eliminar la oficina de refugiados del Departamento de Estado.
La carta argumentaba que una propuesta de la administración Trump de transferir las responsabilidades de la Oficina de Refugiados, Población, y Migración (PRM) a otras agencias socavaría el apalancamiento diplomático estadounidense en la lucha contra las crisis externas.
Entre los funcionarios jubilados que firmaron la carta estaban el ex subsecretario de Estado William Burns, los ex subsecretarios de Estado para asuntos políticos Nicholas Burns y Wendy Sherman, y el ex enviado de paz de Oriente Medio, Dennis Ross.
“Ya sea en Irak, Afganistán, Kenia, Turquía o Sudán del Sur, los esfuerzos del Departamento de Estado para hacer frente a las crisis humanitarias deben incluir la más estrecha coordinación del compromiso diplomático y la asistencia de emergencia”, dijo la carta, Gubernamentales.
“Estamos convencidos de que la eliminación de las funciones de asistencia de PRM tendría repercusiones profundas y negativas para la capacidad del secretario de Estado para influir en las cuestiones de política de interés fundamental para los Estados Unidos”.
La portavoz estatal Heather Nauert dijo que Tillerson “no tiene ideas preconcebidas sobre el resultado del proceso de transformación que ha iniciado en el departamento estatal”.
Agregó que Tillerson consideró que el trabajo de la Oficina de Asuntos Consulares y del PRM es “esencial para la misión del departamento de asegurar nuestras fronteras y proteger al pueblo estadounidense”.
Un memorando a la Oficina de Administración y Presupuesto propone dar la responsabilidad de PRM para el Programa de Admisión de Refugiados de EEUU, que ayuda a reasentar a los refugiados, al Departamento de Seguridad Nacional.
Con información de The Guardian
