Brett Gardner dio un saltó para atrapar una pelota en la cresta del muro del jardín izquierdo, lo que significó el último out del juego que los Yanquis de Nueva York ganaron 7-6 a los Azulejos de Toronto.
Gardner capturó un batazo de Justin Smoak, con las bases llenas, para que concluyera un tenso noveno inning, lo que sentenció una dolorosa derrota para Toronto, líder de la División Este de la Liga.
Un candente juego de septiembre, con implicaciones para la postemporada, se mantuvo emocionante hasta el último swing y se definió a favor de los Yanquis, que hilvanaron su tercera victoria consecutiva.
Toronto sufrió en contraste su cuarto revés en cinco partidos.
Los Yanquis se ubicaron siete juegos encima de la marca de .500, la mejor foja que han tenido en la campaña. Se aproximaron a cuatro juegos y medio del primer sitio en la división, su déficit más reducido desde abril.
Asimismo, siguieron tres juegos y medio detrás en la puja por el segundo wild-card de la Americana.
Smoak llegó a la caja de bateo y conectó un batazo a lo más recóndito del bosque izquierdo. Gardner corrió hacia atrás, saltó y calculó dónde caería la pelota.
Se la llevó mediante un gran salto y los Yanquis acudieron a felicitarlo. Unos minutos después, una repetición de la atrapada en video recibió una nueva aclamación de los fanáticos.
Dramático triunfo de los Yanquis sobre Azulejos 7-6
