WASHINGTON, D.C.- A solo dos días de que entre en vigor un arancel del 25% al acero y aluminio impuestos por el presidente Donald Trump, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, viajó a Washington D.C. para negociar con funcionarios estadounidenses y tratar de frenar la medida.
México busca evitar impacto en exportaciones
Ebrard viaja acompañado por el subsecretario de Comercio Exterior, Luis Rosendo Gutiérrez, según informó la Secretaría de Economía. Su objetivo es evitar afectaciones a la industria acerera mexicana, que exporta 2,100 millones de dólares anuales en estos productos.
Según la Cámara Nacional del Hierro y del Acero (Canacero), los aranceles afectarían al 75% de las exportaciones de acero fabricado en México.
Posibles represalias comerciales
Canacero advirtió que, de aplicarse los aranceles, el gobierno mexicano podría responder con medidas similares contra productos de EE.UU. Además, señalaron que Estados Unidos exporta más acero a México del que compra, generando un superávit de 2.3 millones de toneladas en favor de los estadounidenses.
La Orden Ejecutiva de Trump establece que los aranceles entrarán en vigor el 12 de abril, por lo que México busca una solución antes de esa fecha para evitar un impacto en el comercio bilateral.
