EEUU promete cazar a al-Baghdadi, el líder del EI, hasta la muerte

El líder del Estado Islámico, Abu Bakr al-Baghdadi, probablemente todavía esté vivo y se esconda en la zona fronteriza entre Siria e Irak, dijo un alto general estadounidense.

Cuando el primer ministro iraquí declaró el jueves la victoria sobre Isis en la ciudad de Tal Afar, el teniente general Stephen Townsend dijo a los periodistas que sus fuerzas continuaban la búsqueda de la figura de la elusiva figura del grupo militante.

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“Lo estamos buscando todos los días. No creo que esté muerto “, dijo Townsend, el comandante de la coalición contra Isis en Irak y Siria.

Aunque admitió que no tenía “idea” sobre el paradero exacto de al-Baghdadi, la coalición creyó que pudo haber huido a la región del valle del medio Eufrates entre Siria e Irak después de que las fuerzas Isis fueran lentamente expulsadas de sus fortalezas en Mosul, Raqqa y Tal Afar.

“La última posición de Isis estará en el valle del medio río del Eufrates”, dijo Townsend.

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Cuando lo encontremos, creo que trataremos de matarlo primero. Probablemente no valga la pena intentar capturarlo.

A pesar de una recompensa estadounidense de 25 millones de dólares, al-Baghdadi, de origen iraquí, ha evitado un intenso esfuerzo para buscarlo durante seis años o más.

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El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, un antiguo monitor del conflicto, dijo a mediados de junio que Baghdadi había muerto en la provincia siria de Deir Ezzor.

El ejército ruso dijo a mediados de junio que estaba tratando de verificar si lo había matado en un ataque aéreo de mayo en Siria.

“No he visto evidencia convincente, inteligencia, o de código abierto u otro rumor o de otro modo que él está muerto … También hay algunos indicadores en los canales de inteligencia de que todavía está vivo”, dijo Townsend.

El líder iraquí, Hayder al-Abadi, dijo que la localidad norteña de Tal Afar había sido liberada de Isis junto con la mayor parte de la provincia de Nínive, a pesar de que los combates continuaron en la pequeña ciudad de Al-Ayadiya.

Con información de The Guardian