Un asesino en serie acusado de agredir sexualmente, matar y desmembrar a hombres que conoció en el distrito Gay Village de Toronto durante siete años se declaró culpable de ocho cargos de asesinato en primer grado.
Bruce McArthur, vestido con un suéter negro, se levantó y dijo “culpable” ocho veces mientras se leían los cargos el martes. La sentencia comenzará el 4 de febrero.
La policía el año pasado encontró los restos de siete de los hombres en grandes plantadores en una propiedad donde McArthur había trabajado. Los restos de la octava víctima fueron encontrados en un barranco detrás de la misma propiedad en el centro de Toronto.
El fiscal, Michael Cantlon, dijo que los casos involucraban agresión sexual o confinamiento forzoso y dijo que los cuerpos estaban ocultos y desmembrados.
McArthur, de 67 años, renunció a su derecho a una audiencia preliminar el año pasado, lo que plantea la posibilidad de un acuerdo de culpabilidad.
McArthur se mudó al área de Toronto alrededor del 2000 y anteriormente vivía en un suburbio donde estaba casado, crió a dos hijos y trabajó como vendedor ambulante de ropa interior y calcetines.
Su negocio de paisajismo era pequeño, pero periódicamente contrataba trabajadores, incluido un hombre de 40 años que desapareció en 2010.
La policía estableció un grupo de trabajo especial para investigar las desapariciones de hombres en el área de la aldea gay de Toronto poco después de que algunos desaparecieron. McArthur fue arrestado seis meses después.
Las presuntas víctimas encajan en un patrón: la mayoría eran de ascendencia del Medio Oriente o del sur de Asia y vivían en los márgenes de la sociedad canadiense, y sus desapariciones atraían poca atención.
Una víctima ocultó el hecho de que era gay de su familia musulmana. Otro fue un inmigrante reciente con un problema de drogas. Otra presunta víctima fue sin hogar, fumó cocaína crack y trabajó como prostituta.
Pero entonces Andrew Kinsman desapareció. El activista LGBT de 49 años y ex barman en Toronto tenía muchos amigos. Cuando repentinamente desapareció el día después del desfile de orgullo gay de Toronto, sus amigos se dieron cuenta rápidamente, y también lo hizo la policía.
La policía estableció otro grupo de trabajo especial para investigar las desapariciones de hombres en la aldea gay poco después de que Kinsman desapareciera.
Los miembros de la comunidad LGBT expresaron durante mucho tiempo las preocupaciones sobre un potencial asesino en serie y pidieron respuestas a la luz de las desapariciones, que se consideraron sospechosas. Un grupo de trabajo inicial de la policía en 2012 no condujo a un arresto.
