Los planes para matar a un zar antidrogas y los nombres de dos altos funcionarios del gobierno que aceptaron sobornos de un millón de dólares se encuentran entre las revelaciones de esta semana en el juicio del ex narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Un ex jefe de operaciones del Cartel de Sinaloa dijo que Guzmán quería asesinar al principal fiscal antidrogas del gobierno federal en 2005 porque no aceptaría sobornos, dijo ayer un testigo clave de la fiscalía.
Jesús Zambada, quien está brindando testimonios sobre las supuestas actividades criminales del acusado, dijo a los jurados que Guzmán y su hermano y actual líder del cartel Ismael “El Mayo” Zambada planeaban asesinar a José Luis Santiago Vasconcelos porque “no cooperó con nadie”.
El ex zar antidrogas, que trabajaba para la oficina del Procurador General de la República (PGR), fue respetado y temido por todos porque no aceptaba el dinero del cartel, dijo Zambada.
El ex miembro del cartel dijo al tribunal que le pidieron que participara en el complot de asesinato ayudando a localizar a Santiago y que “proporcionara seguridad a los hombres armados” encargados de matarlo.
Zambada dijo que inicialmente accedió a la solicitud, pero después de preguntar al sicario principal de su hermano, o sicario, cómo planeaba matar al funcionario, se retiró de su compromiso porque “lo que iban a hacer no parecía correcto”.
El testigo dijo que su hermano más tarde le dijo que se olvidara del plan.
Santiago fue finalmente asesinado en noviembre de 2008 cuando un avión del gobierno en el que viajaba se estrelló en la Ciudad de México. Juan Camilo Mouriño, secretario federal del interior en ese momento, también murió en el accidente.
En la corte hoy, Zambada comenzó a nombrar nombres. Dijo que entregó US $ 6 millones a Genaro García Luna a mediados de la década de 2000, cuando García era el jefe de seguridad de México e hizo otros pagos de un millón de dólares a Gabriel Regino, quien era jefe de seguridad en la Ciudad de México cuando el presidente electo López Obrador era alcalde. .
García, ahora consultor y socio en una empresa que evalúa el riesgo y la seguridad, no ha respondido públicamente a la acusación.
Regino negó la acusación con una respuesta en Twitter y declaró que estaba preparado para declarar su inocencia ante cualquier autoridad nacional o extranjera. Ahora trabaja como abogado criminalista y enseña en la Universidad Nacional Autónoma de México.
Ayer, en el tribunal federal de Brooklyn, el equipo de defensa de Guzmán representó a Zambada como un mentiroso que aceptó enmarcar a su cliente a cambio de una reducción en su propia pena de prisión.
