El Papa Francisco dirigió su ira a los adjetivos mientras daba sus opiniones sobre el lenguaje al equipo de comunicaciones del Vaticano, diciendo: “Soy alérgico a esas palabras”.
En un discurso al equipo el lunes, el Papa apuntó especialmente a la palabra “auténtico”, especialmente cuando describió a “cristianos auténticos”.
“Hemos caído en la cultura de los adjetivos y adverbios, y hemos olvidado la fuerza de los sustantivos … ¿Por qué decir auténticamente cristiano? Es cristiano! El mero hecho del sustantivo “cristiano”, “yo soy de Cristo” es fuerte: es un sustantivo- adjetivo, sí, pero es un sustantivo.
“El comunicador debe hacer que las personas entiendan el peso de la realidad de los sustantivos que reflejan la realidad de las personas. Y esta es una misión de comunicación: comunicarse con la realidad, sin endulzar con adjetivos o adverbios “.
El Dicasterio Vaticano para la Comunicación, dirigido por el prefecto Paolo Ruffini, se sometió a una renovación este año, con Matteo Bruni, un anglo-italiano, nombrado director de la oficina de prensa en junio. El nombramiento de Bruni se produjo después de la salida abrupta del estadounidense Greg Burke a fines de diciembre.
Francisgo comenzó su discurso ante el equipo de comunicaciones diciendo: “Tengo un discurso para leer, no es mucho, son siete páginas … pero estoy seguro de que después de a primera la mayoría de ustedes se quedarán dormidos”.
Luego agregó: “Para la Iglesia, la comunicación es una misión. Ninguna inversión es demasiado grande para difundir la Palabra de Dios. Al mismo tiempo, cada talento debe ser bien gastado, hecho para dar fruto “.
Francisco agradeció al equipo, que también es responsable de mantener su popular cuenta de Twitter, por su trabajo.
“¿Pero cómo debería ser la comunicación?”, Dijo. “Una de las cosas que no debes hacer es publicidad, mera publicidad. No debe comportarse como una empresa humana que intenta atraer a más personas … Para usar una palabra técnica: no se debe hacer proselitismo. No es cristiano hacer proselitismo “.
Con información de The Guardian
