El Parlamento británico vota a favor de retrasar el Brexit

Se espera que el Brexit se retrase por al menos tres meses, luego de que el parlamento optó abrumadoramente por solicitar una extensión al artículo 50 en otro día de votaciones divisivas que expusieron la división en el fracturado gabinete de Theresa May.

Ahora se espera que la primera ministra traiga de nuevo su acuerdo Brexit dos veces derrotada al parlamento, después de que ella retuvo el control de los próximos pasos del proceso.

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Los votos, los últimos en una serie de decisiones parlamentarias vitales sobre Brexit durante varios días, significan que la salida de Gran Bretaña de la UE no debería tener lugar antes del 30 de junio y le dio al primer ministro una ventana para resucitar su plan.

Pero el gabinete de May se dividió una vez más y ocho ministros del gabinete, entre ellos el secretario de Brexit, Steve Barclay, y la líder de la casa, Andrea Leadsom, votaron en contra de la moción del gobierno que extiende el artículo 50, prefiriendo mantener la amenaza de no negociar. En total, más de la mitad de los parlamentarios tory votaron en contra de la moción.

Barclay cerró el debate para el gobierno y dijo: “Es hora de que esta Cámara actúe en beneficio del interés nacional, es hora de presentar una extensión que sea realista”, antes de pasar por el lobby para rechazar ese argumento. Fuentes gubernamentales insistieron en que no tenía intención de renunciar, a pesar de su acción sin precedentes.

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El secretario del Brexit, Keir Starmer, dijo: “Esta noche, el secretario del Brexit votó en contra de la moción de su propio gobierno sobre el Brexit, que anteriormente había defendido en la Cámara de los Comunes. Eso es equivalente al voto del canciller contra su propio presupuesto. Este es un gobierno que ha perdido completamente el control “.

Sin embargo, las divisiones de Labour sobre el Brexit también se mostraron claramente. El partido azotó a sus parlamentarios para que se abstuvieran de una enmienda que pedía un segundo referéndum, pero 24 parlamentarios laboristas desafiaron a los látigos a votar por ellos; y 17 se rebelaron para votar en contra, incluyendo varios frontbenchers.

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Ruth Smeeth, diputada de Stoke-on-Trent North, renunció como secretaria parlamentaria privada del vicepresidente del Labour, Tom Watson, después de votar en contra de un referéndum.