Una mujer muy embarazada, tres de sus hijos y su suegro han sido identificados como cinco de las 26 víctimas de la masacre ocurrieda en una iglesia de Texas el domingo.
Las autoridades dijeron en una conferencia de prensa el lunes que los asesinados tenían edades comprendidas entre los 18 meses y los 77 años. Las 20 personas heridas fueron entre cinco y 73 años.
Crystal Holcombe fue asesinada junto con tres de sus cinco hijos, dijo su primo Nick Uhlig a los periodistas. Los otros dos hijos de Holcombe resultaron heridos, agregó.
“Ella ni siquiera bebe, fuma o nada”, le dijo Uhlig al Houston Chronicle. “Ella solo se ocupa de los niños, cría cabras y hace queso casero”. Ese tipo de cosas. No salen a bailar ni nada por el estilo. Son muy anticuados, con los pies en la tierra “.
El suegro de Holcombe, Bryan Holcombe, había trabajado en el ministerio en una prisión, dijo Uhlig. “Subía a la prisión con el ukelele para cantar”.
Annabelle Pomeroy, de catorce años, hija del pastor de la iglesia, Frank Pomeroy, también ha sido confirmada muerta en la masacre. Sus padres estaban lejos de casa, en diferentes estados, cuando ocurrió el ataque.
“El cielo realmente ganó un ángel realmente hermoso esta mañana junto con muchos más”, dijo el tío de la niña, Scott Pomeroy, en Facebook, publicando una foto de la chica sonriente junto a la piscina en traje de baño. Todos los despojados de la vida en el baño de sangre del domingo, escribió, “han tomado su último aliento de aire sucio y han tomado su primer aliento de aire celestial con cuerpos nuevos sin dolor ni sufrimiento”.
Con información de The Guardian
