Durante el embarazo se presenta una alta producción de grasa en la piel, por lo que es común que aumente el brillo en la cara y si la mujer gestante cuenta con antecedentes de acné, es probable que lo desarrolle nuevamente, en caso contrario, podría sufrir de espinillas de manera transitoria.
El doctor Jesús González López, ginecólogo del Hospital de Gineco Obstetricia (HGO) número 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó que lo ideal es lavarse el rostro por lo menos dos veces al día y no utilizar cremas. Advirtió que también es común que aparezcan manchas conocidas como paño y por ello, no es recomendable que la mujer gestante se exponga al sol.
Dijo que es habitual que el melasma, nombre clínico que se le da al paño, aparezca principalmente en mejillas o frente como consecuencia del aumento en la producción de melanina durante el embarazo, que es la sustancia que proporciona pigmentación a piel, cabello y ojos.
Además, agregó, es frecuente que se observe un oscurecimiento de la piel también en axilas, entrepierna y pezones.
El especialista mencionó que además se presentan las estrías, ocasionadas por la ruptura de los tejidos de la piel debido al estiramiento extremo que se sufre durante la etapa gestacional.
“Generalmente las estrías aparecen en el vientre, los senos, espalda, tronco, glúteos y piernas, por lo tanto es necesario hidratar la piel de todo el cuerpo con cremas nutritivas y de contenido aceitoso para combatir la resequedad”, dijo.
Apuntó que es frecuente que haya mucha comezón, lo que indica resequedad y alerta sobre la necesidad de una mayor hidratación para prevenir la aparición de estrías.
González López agregó que las palmas de las manos y plantas del pie, suelen tornarse rojas e incrementar la aparición de verrugas.
“Asimismo, es posible la aparición de várices debido a que los vasos sanguíneos se alteran debido a presión ejercida por el crecimiento del útero”, puntualizó.
Para prevenirlas, recomendó caminar por lo menos durante 30 minutos diarios, hidratar bien las piernas utilizando alguna crema nutritiva, mantenerlas en posición elevada 10 minutos dos o tres veces al día, utilizar medias elásticas y evitar usar ropa ajustada.
Afortunadamente, manifestó el doctor González López, el acné en embarazadas es temporal y desaparece una vez concluido el período de gestación. Sin embargo, las estrías y várices son permanentes.
Añadió que el desarrollo de estrías dependerá del tipo de piel de la mujer, el nivel de crecimiento del abdomen, del estiramiento de la dermis y la adecuada hidratación que mantenga durante su embarazo.
Lo recomendable, dijo, es utilizar cremas hidratantes desde el inicio del embarazo, no sólo en los últimos meses de la gestación cuando se registra una mayor ganancia de peso y retención de líquidos.
