Los orígenes de un misterioso “espejo espiritual” utilizado para conectar las cortes de las reinas inglesas con el mundo de lo oculto se remontan a los volcanes de Mesoamérica. Según el nuevo estudio, el espejo negro volcánico fue elaborado por los aztecas hace unos 500 años, enviado a través del Atlántico poco después de la conquista colonial española y terminó en manos de los confidentes más cercanos de Isabel I.
La increíble historia de este objeto de otro mundo se informó recientemente en la revista Antiquity.
Se sabía que el espejo era propiedad de John Dee, un matemático, astrónomo, ocultista y alquimista inglés que se desempeñó como asesor de la reina Isabel I (1533-1603). Aunque principalmente conocido como el astrónomo de la corte de Isabel I, se sumergió cada vez más en la magia, lo sobrenatural y lo oculto en sus últimos años, como un erudito mitad mago, mitad renacentista. Se creía que el objeto, que es poco más que una paleta negra ligeramente brillante, actuaba como una herramienta para comunicarse con entidades espirituales. Hecho de obsidiana, un vidrio volcánico negro, la gente miraba profundamente la paleta reflectante y afirmaba ver tenues destellos del mundo de los espíritus.
“John Dee probablemente usó varios objetos diferentes para tratar de comunicarse con los espíritus o como solía llamarlos ‘ángeles’; reconcilió su interés en lo sobrenatural con la piedad cristiana”, dijo el profesor Stuart Campbell, autor principal del estudio y arqueólogos de la Universidad de Manchester, dijo a IFLScience.
“El espejo de obsidiana fue probablemente uno de los varios espejos o bolas de cristal que se usaron para llamar a los espíritus. John Dee no hizo esto él mismo, sino usando médiums, quienes afirmaron poder comunicarse con los espíritus o ángeles, mientras que los médiums eran de una honestidad muy dudosa, el propio John Dee parece haber creído completamente en este proceso “, explicó el profesor Campbell. “Asumiría que los reflejos bastante tenues en el espejo de obsidiana se prestaron a afirmaciones dramáticas de que se podían ver cosas ocultas dentro de él”.
Siglos después de la muerte de John Dee, persistió el rumor de que el objeto fue creado por aztecas en las Américas; después de todo, esta cultura también usó espejos de obsidiana con fines espirituales y rituales tradicionales. Sin embargo, no hubo pruebas contundentes que explicaran cómo John Dee puso sus manos sobre el objeto.
En un nuevo estudio, un equipo internacional de científicos ha resuelto el misterio de los orígenes del espejo mediante el análisis geoquímico. Analizaron de cerca el espejo de John Dee, otros dos espejos aztecas y una losa de obsidiana rectangular pulida que también se conserva en el Museo Británico. Su trabajo sugiere fuertemente que los cuatro artefactos fueron hechos de obsidiana mexicana, que fue fuertemente explotada por los aztecas. El espejo de John Dee parece haber sido creado específicamente a partir de obsidiana obtenida cerca de Pachuca.
“Lo más probable es que haya sido saqueado o proporcionado como ‘tributo’ a la fuerza”, añadió el profesor Stuart Campbell.
El comercio generalizado entre el llamado “Nuevo Mundo” y el “Viejo Mundo” se abrió tras la colonización europea de las Américas en los siglos XV y XVI. Con base en este nuevo estudio, podemos asumir con seguridad que el espejo místico de John Dee fue solo uno de los muchos objetos arrastrados en este monumental intercambio de bienes, ideas y enfermedades.
“El espejo fue ciertamente enviado de regreso a Europa por los conquistadores españoles del Imperio Azteca alrededor de 1521 o en las décadas posteriores a eso; sabemos que en ese momento se enviaron grandes cantidades de artefactos exóticos y varios espejos similares que ahora se encuentran en las principales Es casi seguro que los museos europeos fueron traídos a Europa en ese momento “, concluyó Campbell.
“Sabemos que el conquistador español Hernán Cortés a veces encargaba artículos a artesanos [aztecas] para poder enviarlos de regreso a la corte española. Por lo tanto, es posible que algunos de estos espejos fueran hechos especialmente en el momento de la conquista de los aztecas. Imperio para enviar de regreso a Europa “, agregó.
Con información de IFL Science
