TIJUANA, Baja California.- Arturo González Cruz solicitó licencia a su cargo como alcalde de Tijuana en dos ocasiones para contender por la gubernatura del estado, pero perdió. Después, obtuvo un puesto en el Congreso de la Unión, no por elección popular sino al dedazo, y volvió a dejar su puesto ahora como diputado federal para volver a la silla de la presidencia municipal de Tijuana que dejó por la diputación y la carpeta de investigación que pesa en su contra por el homicidio del comunicador de redes sociales, Mariano Soto.
Dichas acciones fueron calificadas por el gobernador Jaime Bonilla como una “verdadera vergüenza”, sobre todo por lo que se vivió la madrugada de este miércoles cuando González Cruz llegó al Ayuntamiento de Tijuana y se atrincheró en la Sala de Cabildo con la intención de tomar posesión como alcalde.
“De Arturo González Cruz podemos esperar cualquier cosa, es un hombre que no está equilibrado. Llegar a las 12 de la noche cuando le quedan 48 horas. Siempre lo dijimos, no está muy bien Arturo”, indicó Bonilla Valdez.
El mandatario estatal también descalificó el actuar del Congreso del Estado que revocó la licencia definitiva concedida por la Legislatura pasada a González Cruz para que este atendiera diversos asuntos que en su momento indicó el propio alcalde de Tijuana, fue por un tema de una herencia y no por el caso del homicidio del comunicador Mariano Soto.
En ese sentido, Bonilla Valdez expresó que la decisión del Congreso está relacionada directamente con la municipalización del agua.
“Eso de contradecirse en algo que habían votado se va a saber en donde están los intereses mezquinos detrás de todo este movimiento, yo sospecho que es el tema del agua. Al final de día no es tanto por dar un servicio del agua, sino por quedarse con los recursos del agua”, explicó el mandatario estatal.
Pero, ¿qué tiene que ver el que regrese González Cruz al Ayuntamiento de Tijuana con la municipalización del agua? El pasado lunes 27 de septiembre la regidora Mónica Vega solicitó en sesión extraordinaria de Cabildo subir un punto de acuerdo a la orden del día que no ha estado contemplado y que generó una discusión entre los ediles que no estaban de acuerdo.
El punto que intento subir a la orden del día era la revisión del decreto de la municipalización del agua. En el calor de la discusión entre los regidores, la entonces alcaldesa de Tijuana, Karla Ruiz, aseguró que lo incluirán, sin embargo, dijo que ese tema ya no le competía al Cabildo, momentos después solicitó un receso del cual nunca volvió. 24 horas después Arturo González Cruz pidió licencia como diputado federal para volver al Ayuntamiento de Tijuana como presidente municipal, lo anterior le permitió retomar la sesión de Cabildo pendiente y votar el tema de la municipalización.
Con información de: Carolina Vázquez
