La ciencia se ha superado a sí misma una vez más. No, no hay palabra aún sobre una fuente de energía limpia ilimitada, o una batería de teléfono que dure más de un día. Aún mejor: han creado una nube de interior que produce gotas de lluvia hechas de tequila real.
La nube de tequila es parte de una instalación en la galería de arte Urban Spree en Berlín, creada por la agencia de publicidad LAPIZ en nombre de la Junta de Turismo de México.
Funciona usando humidificadores especializados para hacer vibrar el tequila a una frecuencia ultrasónica que lo convierte en una niebla espesa y visible. La niebla es entonces capaz de condensarse y caer como gotas de lluvia. Incluso se permite a los visitantes beber la lluvia de tequila de manera gratuita.
Una forma más convencional de crear una niebla vaporosa, como la vaporización por calor, evaporaría todo el alcohol porque hierve a una temperatura mucho más baja que el agua; y eso, definitivamente, no sería una buena idea.
