WASHINGTON, Estados Unidos.- El pasado domingo, un juez federal falló ante el gobierno de Estados Unidos, pues pidió que se dejará utilizar una orden de salud pública para expulsar a familias migrantes que son detenidas en la frontera con México.
El juez Emmet Sullivan dio dos semanas, al gobierno de Biden, para detener esta práctica que los opositores consideran como innecesaria, pues se basa en la “amenaza” que representa la pandemia de covid-19.
En respuesta a una demanda presentada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) y por otras familias migrantes, Sullivan realizó un interdicto y comentó que era probable que tuviera éxito su impugnación al uso de la ley de salud pública conocida como Título 42.
Omar Jadwa, director del Proyecto Derechos de los Inmigrantes de la ACLU, comentó que “el presidente (Joe) Biden debería haber puesto fin a esta política cruel e ilegal hace tiempo, y el tribunal ha hecho bien en rechazarla hoy’’.
Al comenzar la pandemia, y durante el gobierno de Donald Trump, se aplicó el Título 42 para ayudar a controlar la propagación del virus en instalaciones de detención, al devolver a los migrantes detenidos por la Patrulla Fronteriza sin darles una oportunidad de pedir asilo en EEUU.
Sin embargo, “en vista de la amplia disponibilidad de pruebas, vacunas y otras medidas de minimización” para hacer frente a la propagación de covid, el juez destacó que el uso del Título 42 en este caso es “probablemente ilegal” e innecesario.
Con información de Excelsior
