KERMAN, Irán.- Cincuenta personas murieron y más de 200 resultaron heridas en una estampida cuando los iraníes se reunieron para el entierro del general y líder militar Qasem Soleimani, asesinado en un ataque con aviones no tripulados de Estados Unidos.
Las muertes en la ciudad natal de Qasem Soleimani, Kerman, llevaron a que la ceremonia se retrasara.
El entierro es el último de una serie de eventos funerarios que han llevado a millones a las calles de Irán.
El asesinato de Soleimani ha generado temores de un conflicto entre Estados Unidos e Irán.
El jefe de la fuerza Quds tenía la tarea de defender y proyectar los intereses iraníes en el extranjero, y fue aclamado como un héroe por muchos en su país de origen. Inmediatamente después de su muerte, Irán amenazó con represalias.
Las emociones intensas en la ciudad iraní del sudeste ocurrieron al comienzo de una procesión fúnebre que había atraído a un gran número de personas el martes por la mañana, antes del entierro planeado.
Testigos presenciales dijeron a BBC Persian que las calles no eran lo suficientemente anchas como para contener el número de personas y, con otras carreteras cerradas, no había a dónde escapar.
Un forense citado por la agencia de noticias Isna de Irán calculó el número de muertos en 50, y los heridos sumaron más de 200.
El video en línea mostró a las personas en el suelo, con la cara cubierta por la ropa.
Información de la BBC
