Estados Unidos, la UE, Canadá y Ucrania ordenaron la expulsión de docenas de diplomáticos rusos en respuesta al ataque de agentes tóxicos en el Reino Unido, en una muestra de solidaridad que representa el mayor golpe concertado a las redes de inteligencia rusas en el oeste desde la guerra fría .
Más de 100 diplomáticos rusos supuestamente espías en países occidentales deben regresar a Moscú, en una respuesta coordinada al uso de un arma química en el intento de asesinato de Sergei Skripal, un ex funcionario de la inteligencia rusa, y su hija, Yulia, en Inglaterra el 4 de marzo.
En una sombría declaración en la Cámara de los Comunes, Theresa May dio la bienvenida a lo que ella dijo que era “la mayor expulsión colectiva de oficiales de inteligencia rusos en la historia”.
“He encontrado una gran solidaridad de nuestros amigos y socios en la UE, América del Norte, la OTAN y más allá en las últimas tres semanas, ya que nos hemos enfrentado a las secuelas del incidente de Salisbury”, dijo el primer ministro. “Y juntos hemos enviado un mensaje de que no toleraremos los continuos intentos de Rusia de burlar el derecho internacional y socavar nuestros valores”. Agregó: “Si el objetivo del Kremlin es dividir e intimidar a la alianza occidental, sus esfuerzos han fracasado espectacularmente. ”
El gobierno ruso calificó las expulsiones como “un gesto provocativo” y dijo que tomaría represalias de la misma forma, lo que elevaría la perspectiva de más expulsiones por ojo, ya que Estados Unidos y Europa dejaron la puerta abierta a medidas adicionales.
Estados Unidos ordenó la expulsión de 60 funcionarios rusos que Washington dice que son espías, incluida una docena de las Naciones Unidas, y le dijo a Moscú que cierre su consulado en Seattle, lo que pondría fin a la representación diplomática de Rusia en la costa oeste.
Los miembros de la UE, Alemania, Francia y Polonia, expulsarán a cuatro diplomáticos rusos con antecedentes de agencias de inteligencia. Lituania y la República Checa dijeron que expulsarían a tres y España, Dinamarca, Italia y los Países Bajos dos cada uno. Estonia, Letonia, Croacia, Finlandia y Rumania expulsaron a un ruso cada uno. Ucrania, que no es miembro de la UE, debe expulsar a 13 diplomáticos rusos, mientras que Albania, un miembro candidato de la UE, ordenó la salida de dos rusos de la embajada en Tirana. Macedonia, otro candidato de la UE, expulsó a un funcionario ruso.
Al final del día, una pequeña “coalición de los que no estaban dispuestos” dentro de la UE había indicado al Foreign Office del Reino Unido que no estaban preparados para expulsar a diplomáticos rusos. Los ocho países fueron Portugal, Austria, Bulgaria, Chipre, Malta, Eslovaquia, Eslovenia y Luxemburgo. Bélgica e Irlanda no hicieron ningún anuncio, pero indicaron que se tomarán medidas después de las reuniones del gabinete.
Con información de The Guardian
