SAKIR.- Sergio Checo Pérez se presentó con el Red Bull RB16B en donde no estuvo libre de problemas.
El mexicano finalizó octavo de los 16 que tomaron pista el sábado en Sakhir en una rara y extraña presentación del piloto mexicano.
Quedando alrededor de una hora y 20 minutos de sesión, Checo iba en la recta principal siguiendo la estela del Williams. Todo muy rutinario: un auto sigue a otro para que le tape el aire y el coche de atrás tome mayor velocidad. Pero cuando salió del rebufo y el aire ‘volvió a tocar’ al Red Bull de Checo, fue tal la fuerza del mismo que desprendió parte de la tapa de motor del monoplaza, por lo que las autoridades de la Fórmula 1 detuvieron la tanda de entrenamientos.
Más allá de ese incidente y las complicadas condiciones debido al fuerte viento, Checo no tuvo mayores inconvenientes en su primer día con el equipo. Fue consistente con el compuesto C2 de Pirelli –que es un compuesto duro en la gama del fabricante. Todos los pilotos que le antecedieron, incluido el Mercedes de Valtteri Bottas que se quedó con el mejor crono del día, rodaron con llantas más blandas y veloces.
Fuera de comparaciones contra los rivales, lo mejor para Checo y Red Bull es que el monoplaza RB16B volvió a romper la barrera de las 100 vueltas. El viernes, Max Verstappen fue el más rápido y giró 139 veces. Además, Pérez hizo más giros en la tarde-noche barení que en la mañana y giró más rápido, dejando una sensación de mejoría tanto del auto como del piloto.
Con información efe
