Una investigación conjunta del FBI y la Agencia Nacional de la Delincuencia del Reino Unido concluyó que los hackers rusos eran responsables de enviar falsos mensajes al gobierno de Qatar, provocando la mayor crisis diplomática del Golfo en décadas.
Se cree que el gobierno ruso no estuvo involucrado directamente en los hackeos; en su lugar, se les pagó a hackers independientes para que emprendieran el trabajo en nombre de algún otro estado o individuo. Algunos observadores han afirmado en privado que Arabia Saudita o EAU pudieron haber contratado a los hackers.
Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Bahrein lanzaron el lunes una campaña sin precedentes para aislar diplomática y económicamente a Qatar por sus vínculos con la Hermandad Musulmana, Hamas e Irán. Los cuatro países han retirado sus embajadores. También han lanzado un bloqueo económico, incluyendo la denegación del espacio aéreo, que provocó pánico en la capital, Doha.
Qatar afirma que la operación de hacking fue diseñada para desacreditar al emir de Qatar atribuyéndole observaciones en apoyo de Irán y crítico de Donald Trump. Se ha señalado que las noticias falsas, que eran un producto del hackeos, fueron rápidamente recogidas por las agencias de noticias sauditas y de los Emiratos Árabes Unidos.
El ministro saudí de Relaciones Exteriores, Adel al-Jubeir, dijo que no tenía conocimiento de los resultados de la investigación del FBI. El gobierno ruso ha negado cualquier participación en el hackeo.
En un nuevo endurecimiento del conflicto diplomático, este miércoles a los qatarís fueron prohibidos de aterrizar en cualquier aeropuerto en los Emiratos Árabes Unidos, incluso para transferir vuelos. Los Emiratos Árabes Unidos también han prohibido a sus propios ciudadanos el uso de las redes sociales para expresar sus puntos de vista favorables a Qatar.
En medio de una creciente preocupación regional e internacional, Jubeir, hablando en Alemania, dijo que los estados del Golfo no necesitaban ayuda externa para resolver su disputa. “No hemos pedido la mediación, creemos que este asunto puede tratarse entre los estados del Consejo de Cooperación del Golfo”.
La controversia tiene importantes implicaciones geopolíticas. Qatar es el hogar de la mayor base militar estadounidense en el Golfo y es el mayor exportador mundial de gas líquido. Un peor escenario para Occidente sería la ruptura de la coalición anti-islámica del Estado.
Con información de The Guardian
