Tijuana, BC.- “A pesar de la vigilancia que tenemos ahí pues apenas ahorita van a enterrar al muchacho que murió donde está la pila, ahí lo mataron.”
Con estas palabras de Laura Rebeca Martínez Pérez, residente de Camino Verde, se resume el fracaso de la Cruzada por la Seguridad lanzada por el gobernador Francisco Vega el pasado día 12 de junio, frente a alcaldes, militares, empresarios y representantes de diversos sectores.
La más reciente víctima, que no la última, es un joven que formaba parte de una pandilla a la que le acababan de matar un integrante. Esta vez le tocó a él. Su familia está amenazada de muerte y se niegan a hablar en cámara.
Carlos Juárez Gutiérrez, también residente de Camino Verde desde hace 18 años, ha sido testigo de “muchos problemas pero es que nadie quiere parar (la violencia), si la quisieran parar, la paraban porque todo se sabe. De los conocidos (que han sido ejecutados) nomás como 3 o 4, muertos en violencia, pues mucha droga exactamente mucha droga hay aquí”.
La violencia se atribuye ni más ni menos que a un grupo al servicio de Teodoro García Simental, el Teo, el mismo que desde hace casi una década sembró el terror en esta frontera.
La señora Laura Rebeca Martínez indica que “no tiene ni el mes y ahí donde están las canchas de futbol frente a donde está la tortillería mataron a otro muchacho. Asaltan a la gente cuando uno va a trabajar, a una tía mía que vive enfrente hace que tendrá unas 5 semanas, donde está la iglesia dela Luz del Mundo también unos 3 muchachos la asaltaron a mi tía y es una persona de la tercera edad”.
Desde el lanzamiento de la cruzada por la Seguridad del gobernador Francisco Vega, los muertos no han cesado en las mismas colonias donde desde antes ya se enfrentaban los cárteles de la droga. Tan solo en Camino Verde suman al menos de 8 a 10 muertes en las últimas semanas.
Con información de Juan Arturo Salinas
