CIUDAD DE MEXICO.- Con todas las reservas del caso y sabiendo que en la LMB “las cosas pueden cambiar de un momento a otro” Durango se mantuvo en terapia intensiva y la decisión de dejarlo fuera de la temporada 2024 se tomará en unos días más, en una asamblea extraordinaria.
Los presidentes de equipos de la LMB se reunieron ayer jueves para analizar ese caso tan problemático para la liga y al parecer no llegaron a una decisión definitiva.
Cuando Durango regresó a la LMB en 2017, se puso en entredicho su participación porque el estadio no estaba listo. Sin embargo, los directivos votaron porque se quedara debido a que “hacía más daño afuera que dentro”.
Eso significaba que las fechas sin juegos debido a la posible expulsión de Durango le pegaría en la taquilla a sus rivales.
En este 2024 pasa algo diferente, pero que nos lleva al mismo final.
En 2017 el problema era de infraestructura, lo que se resolvió mandando al equipo de visita un mes. Esta vez, en 2024, como el dueño de los Generales no da la cara debido a sus problemas legales, el equipo está en un “limbo” peligroso en el que la LMB no tiene el derecho a intervenir ese equipo ni por su cuenta ni a través de terceros.
Es decir, si la LMB decidiera tomar en sus manos a los Generales, podría atenerse a una demanda futura que les causaría muchos problemas.
Desafilar al equipo es posible, pero si el dueño ha cumplido con sus deberes, se podría estar incurriendo en otro tema legal. Y luego vienen a colación los peloteros… ¿se pueden mandar a otro club a través de un draft o también sería ilegal?
Abogados externos están revisando el caso para tratar de encontrar una solución que deje contentos a todos, lo que parece muy poco probable si el dueño de los Generales o una apoderado legal no dan la cara.
TIENEN QUE AJUSTAR EL CALENDARIO
En caso de que Durango no juegue en 2024, un ajuste al calendario sería necesario porque cuando menos cinco equipos de la zona norte se quedarían sin jugar seis partidos en casa, lo que les pega directamente en el bolsillo.
Tijuana, Sultanes, Monclova, Laguna, Saltillo están entre los clubes perjudicados.
De una u otra manera, los equipos de la zona Norte perderían nueve juegos en total (sumando visitantes y locales).
De por sí el calendario es corto, si le quitan nueve juegos sería como quitarle el 10 por ciento o un poco más.
Ajustar la zona Norte a nueve equipos y tener un rol de juegos sin que se pierdan partidos será una de las labores titánicas que tiene en sus manos la dirigencia de la LMB.
La situación está que arde y el reloj avanza sin parar rumbo al 11 de abril, la fecha de inauguración de la campaña 2024… que se está poniendo ¡de locura!
Con información de Héctor Bencomo
