Hay altas expectativas de que las cosas mejorarán bajo el nuevo gobierno federal bajo el mandato de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), de acuerdo con una nueva encuesta nacional que también muestra que el presidente electo tiene un fuerte apoyo.
La encuesta realizada por el periódico El Universal entre el 8 y el 12 de agosto muestra que el 69% de los encuestados cree que México mejorará cuando AMLO sea presidente.
En contraste, solo el 6.5% de los encuestados dijo que el país se deterioraría durante el mandato de seis años del nuevo gobierno, mientras que el 16% dijo que seguiría igual y el 7.8% dijo que no sabía qué pasaría.
La encuesta también muestra que el apoyo al desempeño de López Obrador como presidente electo es muy fuerte, con un 64.6% de los encuestados que dicen que aprobaron total o parcialmente sus acciones desde que ganó las elecciones presidenciales.
La cifra es 11 puntos más alta que el 53% de los votos con los que el líder del partido Morena triunfó el 1 de julio y más de 40 puntos más que la calificación de aprobación otorgada al presidente Enrique Peña Nieto en la misma encuesta.
Solo el 12.1% de los encuestados dijo que desaprobaba total o parcialmente el desempeño de López Obrador como presidente electo, mientras que el 12.7% dijo que ni aprobaron ni desaprobaron.
En las seis semanas transcurridas desde que millones de mexicanos acudieron a las urnas para elegir un nuevo presidente y renovar ambas cámaras del Congreso federal, AMLO, como se conoce comúnmente al veterano político, y sus candidatos a cargos en el gabinete han comenzado a delinear los planes del gobierno entrante.
Incluyen la construcción de nuevas infraestructuras como el tren Cancún-Palenque y una nueva refinería de petróleo en Tabasco, el restablecimiento de una Secretaría de Seguridad Pública federal, el traslado de secretarías a ciudades regionales, recortes de sueldos y beneficios de legisladores y funcionarios, plantación de árboles y el establecimiento de una zona libre en la región de la frontera norte, aumentando el salario mínimo y revisando los contratos para el sector petrolero y terminando el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
López Obrador y el posible secretario de finanzas Carlos Urzúa también avanzaron rápidamente para calmar los temores sobre los planes económicos del gobierno entrante, prometiendo que las finanzas de la nación se mantendrán bajo control y que se respetará la independencia del banco central.
Hoy, la calificadora Standard and Poor’s expresó su confianza en que el nuevo gobierno mantendría una política fiscal prudente y evitaría la inestabilidad, y que incluso un rol más activo del gobierno en términos económicos probablemente no sea anti-mercado o populista.
