El gobierno de Chiapas ha reasignado 645 guardaespaldas y 95 vehículos que estaban al servicio de funcionarios públicos anteriores y actuales.
El gobernador recién instalado Rutilio Escandón Cadenas dijo en un comunicado emitido ayer que la decisión de reasignar al personal de seguridad pagado por el estado no solo es parte del programa de austeridad del gobierno sino que también responde a “la demanda social de devolver a la policía a las calles para que Estamos realmente al servicio de los ciudadanos “.
La medida, aprobada por el Congreso estatal el 31 de diciembre, generará ahorros de 6 millones de pesos al mes.
La legislatura de Chiapas revocó dos decretos aprobados por gobiernos pasados, incluido uno aprobado en julio de 2017 que estipulaba que el ex gobernador Manuel Velasco y su fiscal general, Raciel López Salazar, tenían derecho a un detalle de seguridad personal durante 15 años en reconocimiento de los “servicios prestados a la estado.”
El presidente López Obrador, quien evita en gran medida la seguridad personal, dijo el mes pasado que el acuerdo era “un exceso que no debería permitirse”.
Escandón, quien asumió como gobernador del partido de izquierda del presidente Morena el 8 de diciembre, prometió que su gobierno implementará medidas de austeridad mientras gobierna con eficiencia, transparencia y responsabilidad.
Ayer, durante una reunión con los secretarios de su gabinete, el gobernador insistió en la administración responsable de los fondos asignados en el presupuesto para abordar de inmediato la desigualdad social en el estado y trabajar para mejorar la calidad de vida de los residentes de Chiapas.
El estado del sur tiene una gran población indígena y es el más pobre de México, según un informe de 2017 de la agencia de desarrollo social Coneval.
