GHANA.- Ghana, un país pequeño pero con 31 millones de habitantes, se está beneficiando del buen ingenio en su lucha contra el Covid-19.
En Kumasi, la capital cultural del país ubicada en la región de Ashanti, el bloqueo impuesto de dos semanas para controlar los contagios del virus inspiró a un hombre para crear un invento con partes recicladas.
En menos de 48 horas, el zapatero de 32 años Richard Kwarteng y su hermano Jude Osei lograron reunir todos los suministros necesarios para convertir un viejo barril de metal reciclado en un lavamanos con energía solar para fomentar los hábitos de higiene en el vecindario.
Configurado para funcionar con un temporizador de 25 segundos, correspondiente a las pautas para la duración del lavado de manos, el invento necesitó no solo elementos de plomería, sino también ingeniería eléctrica como sensores, alarmas y una placa base, pero podría funcionar como un normal fregadero manos libres.
Afortunadamente, los mercados callejeros de las ciudades de Ghana tuvieron todos los componentes y con la ayuda de un amigo que trabajó como electricista, Kwarteng terminó su invento en solo cinco días.
Osei grabó un video de Kwarteng demostrando cómo usar el dispositivo y lo publicó en las redes sociales. Inmediatamente se volvió viral.
“Fue increíble ver las reacciones y los me gusta”, dijo Kwarteng a CNN. “Comenzamos a recibir llamadas de izquierda a derecha. Estábamos muy orgullosos de nosotros mismos ”, agregó.
Solo dos días después de que el video se volviera viral, los trabajadores del gobierno ghanés contactaron a los hermanos para ver si se podían construir más máquinas para ubicarlas en ciudades de todo el país.
Con información de Good News Network
