Estados de emergencia han sido declarados como el huracán Irma se convirtió en una tormenta de categoría 5 que se prevé que golpeará el Caribe el martes.
La tormenta tuvo vientos máximos sostenidos de 215km/h el lunes por la tarde, y el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dijo que se esperaba que fueran más fuertes. Irma en ese entonces estaba a 790 kilómetros al este de las islas de Sotavento y moviéndose hacia el oeste a 20km/h.
Funcionarios de emergencia advirtieron que la tormenta podría arrojar hasta 25 cm de lluvia, desatar derrumbes e inundaciones repentinas y generar olas de hasta siete metros.
“Estamos considerando al Huracán Irma como un evento muy significativo”, dijo Ronald Jackson, director ejecutivo de la Agencia Caribeña de Administración de Emergencias por Desastre. “No recuerdo un cono tropical que se convirtiera rápidamente en un gran huracán antes de llegar al Caribe central”.
El lunes, Puerto Rico, luchando económicamente, declaró el estado de emergencia y activó a la Guardia Nacional. Florida ha seguido su ejemplo. El centro de huracanes espera que Irma llegue al sur de Florida el sábado y se instó a los residentes de EE.UU. a monitorear el progreso de la tormenta en caso de que afecte a Georgia o a las Carolinas.
Evan Myers, director de operaciones de AccuWeather, dijo: “Este huracán tiene el potencial de ser un gran evento para la costa este. También tiene el potencial de aumentar considerablemente la necesidad de recursos gubernamentales tras el huracán Harvey.
Irma será el segundo huracán de gran alcance en golpear los Estados Unidos y sus territorios en las últimas semanas. Los residentes de Texas y Luisiana siguen sintiendo los efectos catastróficos del huracán Harvey, que golpeó a Texas como un huracán de categoría 4 el 25 de agosto y dejó varios metros de lluvia, destruyendo miles de hogares y negocios.
Ricardo Ramos, director de la compañía de energía de Puerto Rico, predijo que la tormenta podría dejar algunas zonas del territorio estadounidense sin electricidad durante cuatro a seis meses.
El sistema de la compañía eléctrica se ha deteriorado enormemente en medio de la recesión de una década en Puerto Rico y el territorio sufrió una apagón en toda la isla el año pasado.
Con información de The Guardian
