La Cámara de Representantes de los Estados Unidos votó el jueves para formalizar los procedimientos del impeachment (juicio político) contra el presidente Donald Trump.
En una votación ampliamente partidaria de 232-196, la Cámara se embarcó en un camino que parecía conducir al impeachment de Donald Trump, si no necesariamente su destitución. La presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, presidió el voto y lo marcó con un golpe de martillo.
Los republicanos ocuparon filas para votar de manera uniforme en contra del proceso, mientras que dos demócratas cruzaron las líneas del partido para unirse a ellos. El único independiente independiente de la Cámara, el ex republicano Justin Amash de Michigan, votó para avanzar en la resolución.
La votación estableció reglas para la fase pública de la investigación, estableciendo una hoja de ruta para el juicio político que podría producir audiencias públicas dramáticas televisadas dentro de dos semanas y un voto sobre el juicio político para fines de año.
“Esta resolución prepara el escenario para la próxima fase de nuestra investigación, una en la que el pueblo estadounidense tiene la oportunidad de escuchar de primera mano a los testigos”, dijo el presidente de inteligencia de la Cámara, Adam Schiff, en un discurso antes de la votación.
“Continuaremos realizando esta investigación con la seriedad de propósito que merece nuestra tarea porque es nuestro deber y porque nadie está por encima de la ley”.
Pelosi calificó la votación como una “ocasión solemne”, pero dijo que era un “paso adelante” necesario para establecer el marco para las audiencias abiertas.
El líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, dijo que los demócratas estaban “tratando de destituir al presidente porque tienen miedo de no poder derrotarlo” en las elecciones de 2020.
Cuando se anunció la votación, Trump tuiteó: “¡La mayor cacería de brujas en la historia de Estados Unidos!”
Durante semanas, los investigadores del Congreso han estado entrevistando a testigos, 15 y contando, a puerta cerrada sobre la presunta mala conducta de Trump, quien está acusado de utilizar el poder de su oficina para solicitar interferencia extranjera en las elecciones estadounidenses de 2020.
Con información de The Guardian
