GREENVILLE, California.- Un incendio activo desde hace tres semanas redujo a cenizas el centro de una población al norte de California.
El incendio Dixie, agravado por vegetación seca y vientos de 64 km/hr, arrasó la población de Greenville el miércoles por la noche.
Las llamas destrozaron una gasolinera, un hotel y un bar entre muchos inmuebles de este pueblo, el cual fue fundado hace más de un siglo.
De momento, no se sabe cuántos edificios resultaron destruidos por el siniestro, pero fotografías y videos del lugar indican la magnitud que tuvieron las llamas.
Doug LaMalfa, legislador, publicó un conmovedor video en Facebook, donde dijo: “Esta noche perdimos Greenville, […] No hay palabras”.
La comisaría del condado de Plumas advirtió a los 800 habitantes a través de Facebook, en una publicación que leía “¡Están en peligro inminente y DEBEN partir ya!”.
El incendio ya había arrasado más de 1,130 kilómetros cuadrados con docenas de viviendas antes de iniciar su nueva expansión.
El miércoles, el incendio creció a miles de hectáreas y se ordenó la evacuación de cuatro mil personas. Casi 26 mil 500 personas de varios condados han debido abandonar sus hogares.
Desde el miércoles priman condiciones de calor intenso, baja humedad y vientos fuertes, se pronostica que se prolongarán durante la noche del jueves.
Con información de La Jornada
