Incontinencia urinaria afecta más a mujeres

Ensenada – edad es considerada como uno de los principales factores que ocasionan la capacidad para evitar que la orina se escape de la uretra; la incontinencia urinaria implica su pérdida involuntaria, lo que ocasiona problemas higiénicos y sociales.

Las consecuencias son molestas e incapacitantes precisó el doctor David Abraham Fabián Encarnación director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 25 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Ensenada.

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Explicó que las causas son variadas, aunque influyen de manera importante la obesidad, embarazos, partos, trabajos pesados, infecciones urinarias, cirugías de vejiga, diabetes, medicamentos, afectación al sistema nervioso, depresión e ira.

Dijo que la mayoría de los problemas de control de la vejiga ocurren cuando los músculos están demasiado débiles, por lo que es posible que al estornudar, reír o realizar esfuerzos, haya pérdida de orina involuntaria.

Detalló que los síntomas abarcan necesidad de ir al baño más de 8 veces al día y 3 veces en las noches; ansiedad por orinar y alcanzar el baño rápidamente; fuga de orina al hacer esfuerzos mínimos -como estornudar, toser y reír-, debilidad progresiva del chorro urinario, infecciones frecuentes de la vejiga y dolor.

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La mayoría de los pacientes sienten vergüenza al mencionar al médico su problema, ya que creen que es una parte normal del envejecimiento. Sin embargo, si la incontinencia puede mejorar con el tratamiento. Cuando los síntomas son molestos, hacen limitan las actividades e interfieren con la vida diaria, es importante acudir con el médico para detectar las alteraciones que la provocan.

Advirtió que las complicaciones son poco comunes y leves, abarcan problemas físicos y psicológicos como fístulas, abscesos, irritación de la vagina, dolor durante las relaciones sexuales, úlceras, olores desagradables, infecciones urinarias, flujo vaginal, pérdida de la autoestima, dependencia, ansiedad, soledad, abandono y disminución de la actividad sexual.

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Finalmente, puntualizó que es un problema que se puede prevenir o retrasar adoptando serie medidas básicas como reducir el consumo de café, alcohol y algunos medicamentos diuréticos; evitar la obesidad, combatir el estreñimiento, practicar los ejercicios de Kegel, no ingerir bebidas por las tardes y hacer esfuerzo para orinar, ya que el aumento de presión podría dañar los músculos pélvicos.