TIJUANA, Baja California.- Nadie sabe dónde está Carlos. Mientras el Sistema de Desarrollo Integral para la Familia (DIF) responsabiliza por la custodia del menor guatemalteco al Instituto Nacional de Migración (INM) las autoridades de este órgano en el estado le echan la bolita al DIF estatal.
“El Instituto Nacional de Migración pone a disposición del DIF a los menores de edad y es el DIF quien debe gestionar su alojamiento”, señaló el titular de la Oficina de Representación del Instituto Nacional de Migración (INM) en Baja California, Rodulfo Figueroa.
De acuerdo con el DIF, luego de huir del albergue Agape a mediados de enero, Carlos fue entregado a las autoridades migratorias el 21 del mismo mes y estas a su vez lo refirieron al albergue Casa Ymca lugar del que escapó días después por mala conducta.
“El instituto en algún momento lo identificó y quería regresarlo a la casa y comenté que había tenido problemas de conducta”, Uriel Gonzalez, coordinador de Casas Ymca.
Por su parte el INM asegura es responsabilidad del DIF velar por la seguridad de todo menor mexicano o extranjero que no se encuentre bajo la tutela de sus padres.
Según el padre Alberto Rivera, director del albergue Agape, denunció a la Procuraduría de la defensa del Menor y la Familia que Carlos había sido amenazado por activistas estadunidenses, y según afirma el sacerdote, existen agrupaciones que están captando menores y los mantienen ocultos sin reportarlos a las autoridades.
“Ellso tienen varios menores que no estan notificando a las autoridades por temor a que los deporten que son cosas que estan pasando ahorita que son cosas que deben identificar las autoridades”, dijo Rivera.
El paradero del menor que llego a Tijuana con la caravana migrante en noviembre pasado es incierto, mientras la evidente falta de coordinación entre las autoridades estatales y federales parece evidenciar que a Carlos nadie lo busca.
Con información de Fabiola Solano.
