TIJUANA, Baja California.- Un gobernador de dos años que se sintió de seis, así fue la administración de Jaime Bonilla, el primer mandatario de izquierda en Baja California que llegó al poder y acabó con los 30 años de panismo en el estado.
En el último estirón de su administración, PSN platicó en exclusiva con el gobernador saliente y se dejó ver el lado más humano de Jaime Bonilla.
“Fue todo un reto, no fue fácil. Queremos pensar que dejamos el 90 por ciento subsanado porque era imposible pagar tanto adeudo de 30 años. Pero me siento muy contento porque todos mis secretarios trabajaron muy bien”, dijo Bonilla.
Pero antes de llegar al poder y acabar con el panismo, Jaime Bonilla era un hombre dedicado a los medios de comunicación. ¿Cómo fue que se interesó en la política?.
“Para mí la política no fue nada extraño, fui funcionario en Estados Unidos 12 años, antes de ser diputado federal aquí y estaba acostumbrado a tratar, pero eso fue en Estados Unidos, aunque que era una comunidad altamente de mexicanos. Fui 12 años presidente del organismo del agua que son puestos de elección. Cuando yo vengo en 2006 para acá trabajando en la reconstrucción del partido, antes Movimiento de Regeneración Nacional, no fue para mi nada difícil identificar los temas sociales aquí”, expresó Bonilla.
Dijo conocer la problemática del estado porque nació en Tijuana, en la “Liber” (colonia Libertad) y por ello no fue nada difícil entender a la población cuando ésta le solicitaba su ayuda.
Pero antes de ser gobernador, senador y diputado federal, llegó alguien a su vida y fue Andrés Manuel López Obrador.
“Es un movimiento que empezamos juntos, pero obviamente el proyecto es de él. Antes del 2000 yo lo conocí a él, por 1998. Él ya era presidente del PRD, después nos volvimos a conectar cuando gana la regencia y desde entonces, desde que yo conocí al licenciado López Obrador, ha sido un hombre muy congruente”, indicó.
Las políticas públicas que hoy en día se ven no son nada nuevo, dijo Bonilla, y destacó que por años esa fue la lucha que lo contagió para trabajar por la gente, sin embargo, nunca imaginóo deseó ser gobernador.
“No, para nada, es más, yo nunca pensé ni ser diputado. Yo soy un empresario que me he dedicado a los medios y es la coyuntura del licenciado Andrés Manuel López Obrador lo que me empujó a mi ayudar a la gente, porque la política eso es”, comentó.
Otra figura que ha marcado su vida es la de su padre, Don Alberto Bonilla Colmenero, un médico militar que dejó una huella importante en Bonilla y que en cada momento de su administración contaba alguna anécdota de él.
“Métele más ganas, no aflojes, estás durmiendo demasiadas horas, era una persona muy disciplinada, un exmilitar y estaba acostumbrado, si veía que trabajamos ocho horas, nos decía ‘pueden trabajar 10’, y si trabajas 10 y rindes más, trabajas 12”, recordó.
Y efectivamente, su gobierno se caracterizó por trabajar 24/7 sin descanso. Sin embargo, este tiempo que dedicó al pueblo fue el mismo tiempo que dejó a su familia.
“Sí fue muy difícil, típicamente la familia es la que paga los platos rotos, esa es la que se sacrifica, pero he tenido suerte”, aseveró.
Jaime Bonilla tiene cuatro hijos, todos casados y formando su propia familia, familia que lo apoya incondicionalmente.
Aseguró que la fortuna más grande que tiene es que sus hijos fueron muy bien educados por su esposa.
El gobernador saliente llegó al poder en un momento crítico para todo el mundo, la pandemia por el coronavirus.
“No, para nada, a lo mejor una influenza o algún tipo de gripa, pero nadie esperaba una pandemia y menos cómo cambio el mundo. Una pandemia que cambió la manera de pensar, de actuar”, indicó.
Las pérdidas humanas por la pandemia afectaron a todos. En el caso de Bonilla, grandes amigos y colaboradores perdieron la batalla contra el coronavirus.
“A mí me dolió muchísimo, varios colaboradores cercanos, muy cercanos, murieron. Afectaron obviamente mi estado de ánimo, mi manera de pensar y me arrepentí de no haberles dado más tiempo a veces, pero fueron dedicados, fueron honestos”, relató.
Recordó a una persona que por más de 40 años colaboró con él mano a mano, una persona que incluso estuvo a su lado cuando se enfermó por segunda vez de covid-19 en diciembre del 2020. Se trata de Rubén Pérez, su hombre de confianza y gerente general de Primer Sistema de Noticias.
“Fueron leales y lo carga uno en la conciencia, ojalá le hubiera dado más tiempo a este colaborador, se me contagió y se me murió. En el caso de Rubén, un muchacho que tenía conmigo casi 40 años y cuando nos enfermamos, nos enfermamos los dos y aquí estábamos en el condominio los dos encamados”, dijo.
Enfrentar la muerte de quien consideró como su hermano no fue fácil, sobre todo porque su salud se vio comprometida.
“Pensé que me podía morir de eso, igual que ellos, pero así como para perder el sueño y decir ‘me voy a morir’, no, ves las cosas como son y tienes que aceptarlas”, aseveró.
Y así como aceptó que las cosas no iban bien con el coronavirus, Bonilla se ha enfrenado a las críticas de los empresarios por estar del lado del pueblo, acción que no le preocupa.
“Me siento orgulloso, entre más me critiquen por eso, si me critican porque apoyo a la gente más necesitada, pues que me pongan en la lista”, indicó.
Pero, ¿qué sigue para Jaime Bonilla después de la gubernatura?
“Más trabajo y dedicarme un poquito más a mis negocios y lo que el señor presidente me pida que haga”, indicó Jaime Bonilla.
Con información de: Carolina Vázquez
