Una mujer de Nueva York vio una imagen al azar de una silla de peces hace años y sintió una atracción “mística” hacia ella, por lo que se tatuó los muebles originales en la pierna.
El momento se completó recientemente cuando un grupo de extraños viajó 300 millas para presentarle la silla exacta que ella admiraba desde hace mucho tiempo.
Existe un grupo de Facebook llamado “Hallazgos extraños de segunda mano que solo necesitan ser compartidos”, y con casi dos millones de miembros, es una comunidad activa.
Cuando un miembro publicó una foto de una silla divertida, aunque un poco surrealista, con peces de colores del arco iris como rieles traseros, un miembro del grupo se sorprendió especialmente. La mecánica automotriz de Syracuse, Emily DelFavero, tenía un tatuaje del artículo exacto en su pantorrilla.
Cuando mencionó esta extraña pieza a los extraños en Facebook, pronto entraron en acción e insistieron en que ella necesitaba ser dueña de esa silla.
Comenzando un GoFundMe para comprar la pieza peculiar, recaudaron 600 dólares y compraron la pieza en el mercado de pulgas de Baltimore donde se encontraba.
Según On The Road with Steve Hartman, luego idearon un plan para transportar el artículo a más de 300 millas río arriba hasta Emily.
Con información de Good News Network
