Más del 6% de los miembros de Alcohólicos Anónimos son jóvenes que se encuentran en el rango de edad de entre 21 a 30 años.
TIJUANA, Baja California.- La Central Mexicana de Servicios Generales de Alcohólicos Anónimos, A.C., lleva a cabo su 11va Semana Nacional de Alcohólicos Anónimos para los Jóvenes, esto con el fin de informar a los adolescentes a través de pláticas y juntas de información, acerca del programa de recuperación dentro de la institución.
De acuerdo con el coordinador de Alcohólicos Anónimos del área de Baja California, Francisco R., el 6.46% de los miembros son jóvenes de entre 21 a 30 años de edad y el 1.5% pertenece a menores de 21 años, provocando que se pierdan los valores, dejen los estudios y se vuelvan agresivos.
“Por experiencia que hemos tenido en los grupos de AA, están llegando jóvenes con esa problemática, llegan muy acelerados por ese tipo de cuestiones, quieren que el programa de AA funcione rápidamente, hemos visto que hay mucha problemática, porque se están perdiendo los valores, dejan estudios, empiezan a comportarse de una manera muy violenta, no sé si se deba a ese tipo de sustancias que están mezclando, a veces al alcohol lo minimizan, piensan que no les va a hacer daño y le avientan una pastillita, le avientan otra sustancia, para obtener el efecto rápido de la sensación, nosotros le llamamos la sensación de pertenecer, la sensación de perder los miedos y los valores, el día de hoy vemos mucha juventud en las calles, se ven caminando muchos jóvenes perdidos”, indicó Francisco R.
Por su parte, el delegado nacional de Alcohólicos Anónimos en Baja California, Javier H., indicó que no todas las personas que toman bebidas embriagantes deben ser consideradas como alcohólicas, ya que existen tres tipos de bebedores.
“El bebedor social, que lo invitan a una reunión que puede o no acabarse la copa y ya, porque va a socializar, no va a consumir alcohol, el bebedor fuerte es aquella persona que tiene grandes periodos de abstinencia, pero cuando bebe, bebe mucho; en su cumpleaños, 15 de septiembre, bebe terriblemente, hasta perder la razón, pero todavía es funcional, conserva trabajo, familia, tiene todavía decisión, pero qué pasa con el bebedor problema, él ya no puede dejar de beber, a ese ya lo caracterizamos como un alcohólico, porque indudablemente siempre queremos una copa más, perdemos la noción del tiempo, siempre decimos, una y me la curo y ya no regresamos a trabajar, el alcohol nos ha despojado de las libertades de la facultad”, explicó el delegado nacional.
Los primeros focos rojos de un joven que se está volviendo adicto al alcohol son la irresponsabilidad, ya que deja de asistir a la escuela, no llega a su casa, dice mentiras, así lo indicó el delegado nacional de Alcohólicos Anónimos en Baja California, Javier H.
Con información de Ixshel Gómez
