Montserrat Caballero le apuesta a la gentrificación.
La que parece estar muy interesada en elevar el nivel de vida de los residentes de la colonia Independencia en Tijuana es la ya casi exalcaldesa Montserrat Caballero, quien, con sus operaciones de compraventa, contribuye al fenómeno de la gentrificación.
(Le ahorramos la búsqueda en el diccionario: una zona o barrio deteriorado de una ciudad es renovado y revitalizado por la llegada de nuevos residentes con mayor poder adquisitivo. Este fenómeno implica la expulsión de los residentes originales, en su mayoría de bajos recursos, y la sustitución por una población más adinerada).
Y es que, ubicados en el cruce de las calles Abasolo y Rayón, en los predios que ocuparon un local comercial denominado Abarrotes Chapala y al menos cuatro o cinco casas, se encuentran los terrenos adquiridos por la familia Caballero Ramírez, de los cuales contamos con fotografías.
Las operaciones, valuadas en aproximadamente cuatro millones de pesos por conocedores de la zona, quedaron debidamente consignadas en el Registro Público de la Propiedad, el cual registra la compraventa, en diciembre pasado, del lote 6, manzana 37 en la colonia Independencia, con una superficie de 612.50 metros cuadrados y clave catastral IND-037-006.
Pocos meses después, otro de los hermanos de la alcaldesa adquirió un terreno contiguo con folio 936150, ubicado en el lote 9 de la manzana 44.
Pero esto es apenas la punta del iceberg, pues a dichos predios les falta una buena inyección de recursos para construir una o dos torres de condominios que, en venta o renta, ofrezcan calles pavimentadas (donde Montserrat no metió las manos, pues ya estaban debidamente encarpetadas y con alumbrado público antes de que arrancara su malograda administración) y vialidades que comuniquen al potencial comprador a un minuto del centro de la ciudad, a cinco minutos de la Zona Río y a unos diez de la zona Río. Aquí la pregunta es: ¿de dónde saldrán los recursos para construir ese proyecto?
No parece casual que, a un par de calles, se levante un edificio que Jorge Hank le construyó a uno de los asesinos del columnista Héctor “Gato” Félix Miranda, a fin de que su familia no pasara estrecheces durante su encarcelamiento. Recordemos que se trató del operativo efectuado por Vera Palestina, Victoriano Medina y Emigdio Nevárez. No vaya a resultar que al rato salgan socios Montse y el empresario casinero.