Los contaminantes y microorganismos que viven en el agua son perjudiciales para la salud de los vecinos, consideró el director del CIGA.
TIJUANA, Baja California.- La contaminación que tiene la laguna, donde una mujer perdió la vida tras caer al fondo y otra identificada como Daniela Aracely Nava Villalobos, de 21 años, sobrevivió, representa un foco de infección para los residentes de las colonias cercanas por la cantidad de microorganismos que viven en el agua, consideró Jose Carmelo Zavala Álvarez, director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental (CIGA).
“Si es como sucede en muchos escurrimientos de fugas de aguas residuales crudas, es un problema sanitario. A lo que aparente se ve es un crecimiento de algas, esas crecen por los nutrientes que tiene el agua, y es una señal de que hay vida ahí. Las aguas crudas traen problemas gastrointestinales y de salud pública”, dijo.
Zavala Álvarez indicó que estos líquidos residuales pueden tener una segunda vida al ser reutilizados para el riego del campo, pero indicó que actualmente el gobierno del estado no ha hecho un uso inteligente del recurso, el cual, según sus registros, está en escasez en la zona costa.
“Tenemos un rezago histórico en el manejo del agua, y es una tristeza porque estamos en una zona, y más la costa de Baja California, de estrés hídrico. Nuestros acuíferos de toda la zona están en rojo, y además, traemos el agua desde lejos, la usamos de manera poco inteligente, la contaminamos y se va sin tratamiento”. añadió.
El director del CIGA indicó que este tipo de lagunas no naturales son muy comunes en la región fronteriza y exhortó a las autoridades a atenderlas, puesto que pueden generar futuros deslaves.
Con información de Alan Ramírez
