PARIS, Francia.- Al igual que con otras librerías en apuros, la emblemática librería de París Shakespeare and Company experimentó una caída devastadora en los ingresos cuando el cierre de covid-19 los obligó a cambiar drásticamente la forma en que hacían negocios.
“Hemos estado [abajo] un 80% desde el primer confinamiento en marzo, así que en este punto, hemos usado todos nuestros ahorros”, dijo la propietaria de segunda generación, Sylvia Whitman en una entrevista con Afar.
Con esta situación, Shakespeare and Company pidió ayuda a su base de clientes.
En un abrir y cerrar de ojos, se vieron inundados con tantos pedidos en línea, un récord de 5 mil en una semana en comparación a 100 en circunstancias normales, que tuvieron que cerrar temporalmente su sitio de comercio electrónico para ponerse al día con la demanda.
Los esfuerzos no se detuvieron ahí. Whitman encontró una forma novedosa de sobrevivir y prosperar en la era del coronavirus con la ayuda de una iniciativa de membresía recién iniciada, el fondo Friends of Shakespeare and Company.
Los miembros disfrutarán de una serie de eventos especiales en línea y tendrán acceso a otras ventajas dirigidas a ávidos bibliófilos.
Con información de Good News Network
