TIJUANA, Baja California.- El gobernador Jaime Bonilla fue directo: respeta a Mario Delgado como persona pero le envió un mensaje contundente, la dirigencia nacional de Morena no debe meterse en los asuntos del gobierno de Baja California.
Esto en relación a la revocación de mandato en la entidad, donde se presume el presidente nacional de Morena busca por medio de los diputados federales y estatales detener la iniciativa enviada por el jefe del Ejecutivo Estatal.
“Si Mario no se ha podido expresar sobre la revocación de mandato, no debería de meterse el partido con el gobierno, es completamente diferente y lo ha dicho el presidente mil veces, el gobierno es una cosa y el partido otra, pero si creen que van a influir en las decisiones de este gobierno desde la dirigencia nacional, están muy equivocados. Mis respetos para Mario Delgado como persona, pero como dirigente yo le digo, aquí en Baja California tienen gobernador”, comentó Bonilla.
En ese sentido, el mandatario estatal dijo que hasta el último día de su gobierno verá por el bienestar de los bajacalifornianos, incluso aseguró que el 31 de octubre, que es el cierre de su administración, realizará una Jornada por La Paz.
“Aquí a los bajacalifornianos se les va a respetar y si eso lo contemplan porque me peleo, pues sí, me peleo por los derechos de los bajacalifornianos que los gobernadores anteriores no tuvieron el valor para defenderlos y hacían todo lo que a 3 mil kilómetros se decidía, ahora ya no, somos un estado que está siendo respetado”, indicó.
Pero no solo Mario Delgado fue tema de conversación durante la vídeotransmisión matutina del gobernador Jaime Bonilla, también lo fue el dirigente estatal de Morena, Ismael Burgueño.
Bonilla dijo en relación a Burgueño que no dudaría ni un segundo que los nombramientos que le han dado desde la dirigencia nacional son solo para golpetear al propio partido.
Otro personaje que está involucrado precisamente en el tema de la revocación de mandato por no subir el tema al Congreso cuando ya se le había enviado la iniciativa fue el diputado Juan Manuel Molina.
De acuerdo con el gobernador, la actitud de Molina durante la glosa del secretario de Salud, Alonso Pérez Rico, y el encargado de Despacho, Gerardo Solís, fue de ataque y no de cuestionamiento.
Con información de: Carolina Vázquez
