Encarcelan de por vida a un terrorista que planeaba matar a Theresa May

Un terrorista del Estado Islámico que conspiró para matar a Theresa May ha sido condenado a al menos 30 años en prisión.

Naa’imur Zakariyah Rahman, de 21 años, que había prometido lealtad al EI, planeaba bombardear las puertas del número 10 de Downing Street (la residencia de la Primera Ministra), matar a los guardias y luego atacar a May con un cuchillo o pistola.

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Rahman, de Finchley, al norte de Londres, fue atrapado por una red de agentes antiterroristas encubiertos de la policía metropolitana, el FBI y el MI5. Fue declarado culpable de preparar actos de terrorismo a pesar de afirmar que todo era broma.

El vagabundo, originario de Birmingham, estaba recogiendo lo que pensó que era una chaqueta y una mochila con explosivos cuando fue arrestado en noviembre pasado. Pensó que estaba siendo ayudado por un manejador de el Estado Islámico cuando en realidad estaba hablando con oficiales encubiertos.

El joven “inteligente y astuto” tenía el potencial de “operar por debajo del radar con un efecto terrible”, según un informe previo a la sentencia.

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Durante su juicio en Old Bailey, Rahman admitió haber ayudado a un amigo a unirse al Estado Islámico en Libia al grabar un video de patrocinio para el grupo terrorista.

Después de su condena, le dijo a un oficial de libertad condicional que habría llevado a cabo el ataque contra la primera ministra si hubiera podido.

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El juez, Charles Haddon-Cave, dijo que Rahman era “un individuo muy peligroso”, y agregó que era “difícil predecir cuándo, si alguna vez, se desradicalizaría y ya no sería un peligro para la sociedad”.

Rahman fue sentenciado a cadena perpetua con un término mínimo de 30 años. Por el video de patrocinio del Estado Islámico, Rahman fue condenado a seis años de prisión que pagaría  simultáneamente.

El juez hizo hincapié en que los agentes encubiertos involucrados en el caso eran “escrupulosos” en todo momento y que Rahman era el “instigador y autor” de sus propias acciones.

Con información de The Guardian