Llama nuevo Arzobispo a las autoridades a combatir la violencia en Tijuana

Durante su llegada a Tijuana, el nuevo arzobispo, Francisco Moreno Barrón, hizo un llamado a las autoridades a combatir la violencia. Señaló que es necesario el trabajo conjunto para lograr detectar a los grupos criminales antes de que se produzca un problema mayor, señaló durante el evento de bienvenida en El Bordo.

Moreno Barrón “tocó” el muro fronterizo que divide a México de Estados Unidos, a través de esta frontera, y según dijo, lo estará visitando de manera continua durante su misión pastoral. Dijo que para él, ese momento era “una bendición”, ya que es la primera vez que lo veía de manera directa e insistió en la necesidad de la creación de puentes para fortalecer las relaciones, en lugar de muros, que dijo que estos son los que afectan la relación entre los seres humanos.

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Durante conferencia de prensa posterior al evento de bienvenida en El Bordo, el nuevo Arzobispo de Tijuana señaló que la sociedad “lo que menos necesita” son más enconos y rivalidades, y aunque mostró no estar de acuerdo con la propuesta de los “matrimonios entre personas del mismo sexo”, llamó a no pelear por los grandes temas “por difíciles que sean”. Ofreció sin embargo su amistad y diálogo para encontrar respuestas a lo que la sociedad requiere, pero insistió en que no se puede claudicar en los principios que la Iglesia católica mantiene. Habló de respeto hacia “quienes piensan diferente” pero advirtió que esto no significa “condescender con ellos”.

Moreno Barrón, tuvo contacto directo con migrantes, a quienes abrazó y dialogó con ellos, además de recibir la calidez de católicos que fueron a darle la bienvenida. Tal es el caso de la familia Pérez López, procedente de Chiapas que por la enfermedad que padece su pequeño hijo de 4 años, se vieron obligados a salir de su lugar de origen, señalan huyeron de la violencia y la pobreza que se vive en la frontera sur del país.

Ellos no perdieron la oportunidad de saludar al nuevo arzobispo de Tijuana, y externarle la esperanza de que su situación mejore, con la ayuda de Dios.