SAN DIEGO, California.- Un tigres que intentaron introducir de contrabando en la Garita de Mesa de Otay y el otro traído de Washington, DC, para ofrecer compañía, fueron mudados a su hábitat en el Zoológico de San Diego Safari Park.
Uno de ellos es un tigre de Bengala de 3 meses de edad rescatado en agosto en el Puerto de Entrada de Otay Mesa. Por un residente del condado de Riverside de 18 años que fue arrestado.
El otro es un tigre de Sumatra de 4 meses traído desde el Zoológico Nacional Smithsonian en septiembre después de que su madre comenzó a actuar agresivamente hacia él. Los grandes expertos en gatos dicen que es mejor criar cachorros por parejas.
“Los dos cachorros se están adaptando muy bien a su nuevo hogar”, dijo Lori Hieber, guardiana principal de mamíferos en el Safari Park.
“Están muy bien. Actúan como hermanos pequeños: juegan y abrazan mucho, y riñen un poco como la mayoría de los hermanos, pero es un comportamiento natural y saludable “, dijo Hieber.
Los cachorros habían estado en el centro de cuidado de animales del parque conociéndose. Ahora viven en el Tull Family Tiger Trail, donde los huéspedes pueden verlos todos los días de 9 a.m. a 12:15 p.m.
Según los oficiales del parque, los cachorros están totalmente destetados de la fórmula y comen una dieta carnívora. Ambos pesan 15 kilos (32 libras).
A medida que continúen creciendo, el tigre de Bengala finalmente superará al tigre de Sumatra en aproximadamente 90 kilogramos (200 libras).
