TIJUANA, Baja California.- Las personas que presentan síntomas de covid-19 acuden a diferentes instituciones de salud para ser atendidos. En el caso de la Clínica #7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), hay largas filas en espera de poder recibir la atención adecuada, sin embargo, hay personas que refieren haber hecho hasta un día de espera sin haber sido atendidos.
Un caso específico es de la señora Karla Tamayo, de 49 años, quien desde el pasado domingo comenzó a presentar síntomas como falta de aire y un intenso dolor de cabeza.
A pesar de que al día siguiente se presentó a la Clínica #7 del IMSS no fue atendida a pesar de esperar más de 12 horas. La señora Tamayo explicó que entre los compañeros de fila se cuidaron el lugar para poder ir al baño y a comer.
“Estuvimos alrededor de las seis de la mañana hasta las once de la noche, aquí, parada, nos decían que a las cuatro de la tarde, a las cinco de la tarde, y así se la llevaron hasta las once y mucha gente durmió para el día de ayer, el día de ayer atendieron a ciertas personas y hoy llegué como desde las seis de la mañana y todavía no paso, que porque no hay material, diferentes tipos de situaciones”, declaró la ciudadana.
Las personas esperan ser atendidas desde las seis de la mañana, y hacen largas filas que le dan la vuelta a la cuadra. Este fue también el caso de Rafael, de 21 años, que fue canalizado por su trabajo, ya que presentó síntomas hace dos días, y tuvo que esperar al menos cuatro horas para entrar a consulta.
“Empecé con tos leve, el día de ayer tenía mucha fatiga, me empezó a doler el cuerpo y la cabeza, y tosía a veces, como si tuviera la garganta seca tosía y tosía, a las cinco fue mucho más grave me sentía cansado con mucho sueño, literalmente me podía quedar dormido en cualquier lugar”, dijo.
Por la cuestión de las largas filas, muchas personas optan por hacerse una prueba rápida en farmacias de iniciativa privada, como es el caso del señor Jorge que lo hace por seguridad de su familia.
“Tengo una nena que va a cumplir cuatro años, entonces constantemente me las estoy haciendo solamente para descartar y no crear contagios… siempre lo hago en privadas, es más rápido y más práctico”, expuso.
De hecho, algunas empresas sugieren a sus trabajadores optar por alternativas como las farmacias, en lugar de las instituciones de salud pública como en el caso de Araceli.
“Traigo síntomas de gripa, con mucho dolor de garganta, y por mi trabajo me sugirieron que viniera a hacerme la prueba, aquí específicamente… no porque es mucho el tiempo de espera”, indicó.
Es así que las farmacias privadas comienzan a tener bastante afluencia después de las festividades decembrinas, con alrededor de 100 pruebas rápidas diarias. Mientras que instituciones con el IMSS continúan con filas de horas, y que en ocasiones, no son atendidas en su totalidad.
Con información de Sergio Carrillo
