TIJUANA, Baja California.- Los habitantes de Tijuana se oponen a vivir de nuevo la pesadilla que se desató durante el cierre de la garita de San Ysidro en noviembre pasado, ocasionado por el intento de cruce masivo hacía Estados Unidos de miembros de la caravana migrante. La posibilidad del cierre total de la frontera de México con Estados Unidos fue planteada por el presidente de ese país Donald Trump, si los demócratas no incluyen en el presupuesto recursos para financiar el muro entre ambos países.
“Consideró que está mal porque realmente nos afectaría a todos… se benefician ambos países y sería un error… Él está mal, está aferrado en su muro, vi en las noticias que de esa manera quiere presionar, pero está mal completamente”, dijo el ciudadano Ignacio Orozco.
Luego del cierre de la garita, la región registró bajas en la afluencia turística de hasta 90 por ciento, lo que afectó a comerciantes como Marcos Montiel, que se dedica a vender burritos en el cruce fronterizo de San Ysidro y quien vendió menos de la mitad de lo acostumbrado durante las 2 semanas posteriores al cierre.
“Debería de pensar en las personas que trabajamos de este lado y en las personas que van a cruzar, afectando a los dos lados, tanto estadounidenses, mexicanos y comerciantes”, dijo Montiel.
Trump pide 5 mil millones de dólares para la barrera, los demócratas se niegan a ceder y optaron por destinar tan solo mil 300 millones a seguridad fronteriza. El desacuerdo en el Congreso estadunidense ha provocado un cierre parcial de la administración que afecta al 25 por ciento de las agencias gubernamentales, entre tanto Trump insiste en construir el muro fronterizo.
“Aun así el flujo de indocumentados va a continuar, aún pongan 2, 3 muros, es lo mismo, de alguna manera ellos se las arreglan para pasar… algo erróneo, es algo como cuando las 2 Alemania se dividieron, al contrario, está alejando al país de México, en vez de ser más amigos, los aleja”, comentó el ciudadano Pedro Gómez.
Con información de Fabiola Solano.
