ESTADOS UNIDOS.- Nueva Orleans es famosa por su música de jazz, pero la ciudad también tiene un problema con las armas, algo que el trompetista de jazz local Shamarr Allen experimentó al crecer.
Después de enterarse del tiroteo donde un joven perdió la vida, pensó que podría convertir el excedente de trompetas en su casa en oportunidades significativas para cambiar la vida de jóvenes susceptibles a la violencia armada.
“La gente no entiende que estos niños están intentando y queriendo hacer otras cosas”, dijo Allen a NPR. “Pero no hay nada que puedan hacer”.
Allen publicó una oferta simple en las redes sociales: “Para los jóvenes de Nueva Orleans, tráiganme un arma y les daré una trompeta. No habrá preguntas”.
Para garantizar un secreto total, porque Allen supuso que los jóvenes no cambiarían si sentían que no podían confiar en él, contactó al alcalde, quien lo puso en contacto con el jefe de policía. El departamento de policía acordó que aceptarían las armas sin ningún compromiso y sin preguntar nada sobre los niños.
Según Allen, los funcionarios estaban tan contentos como él de ver las armas en la calle.
Hasta ahora, Allen ha recogido cuatro armas y agotó por completo su stock de trompetas de repuesto.
Uno de los casos fue una joven que llevó un arma y sorprendió al músico.
“Nunca sospecharía que ella tendría [una pistola]. Y ella estaba muy emocionada por conseguir [una trompeta] ”, dijo Allen.
Con la esperanza de continuar, Allen obtuvo el apoyo de músicos locales que se ofrecieron como voluntarios para dar clases de música gratuitas a cualquiera que baje el arma e interprete música.
Además, un recaudador de fondos en línea le permitió recaudar 34 mil 800 dólares para instrumentos musicales y suministros.
También ha recibido varias donaciones de instrumentos para su programa, que ahora se llama “Trumpet is My Weapon”.
Con información de Good News Network
