TIJUANA, B. C.- El candidato a gobernador Jaime Bonilla Valdez, por la coalición “Juntos Haremos Historia en Baja California”, se enorgullece de ser nativo de “La Liber”, una de las colonias más antiguas de esta ciudad, colindante en la parte noreste de la Garita Tijuana-San Ysidro.
Allí, al lado de sus padres y sus nueve hermanos, vivió su infancia y adolescencia en una humilde casa que, al tiempo, donaría a la Orden Religiosa de la Madre Teresa de Calcuta para apoyar sus programas de atención humanitaria a los migrantes y residentes necesitados de lo más elemental.
“…Conocí a la Madre Teresa, cuando ella buscaba zonas para brindar servicios religiosos, humanitarios. La que era nuestra casa, de la familia, está ubicado en la esquina de la calle 18 y avenida Luis Moya, en la colonia Libertad…”.
De estos temas conversó con el periodista Odilón García, a quien le compartió su orgullo de ser nativo tijuanense y estar a poco tiempo de convertirse en el próximo gobernador de Baja California, cuyos gobernantes han sido “importados” de otros estados de la República Mexicana.
A esa etapa de su vida, dice, debe su sensibilidad que lo motiva a ofrecer su mano, su amistad y su apoyo a las personas o familias que se acercan en busca de alivio o de una defensa justiciera ante “los abusos de funcionarios corruptos y gobiernos insensibles”.
Contrasta en mucho con la imagen que sus opositores políticos y sus “bots” (falsos seguidores de esos mismos adversarios) han tratado con todo de fabricarle para desprestigiarlo, la de ser un “candidato fifí”, pasando por alto que desde niño aprendió a ganarse la vida, lo que ha sido su incentivo para luchar tenazmente hasta ser un empresario exitoso, un servidor público eficiente.
Además que, por las condiciones económicas “apretadas” de la familia Bonilla, asistió a escuelas públicas para cursar educación primaria y la secundaria; que es integrante de una familia de 10 hijos, que su padre fue militar y su señora madre dedicada al hogar, siempre atenta a los valores familiares.
Compartían sus prendas de vestir, dijo: “Nos poníamos la ropa uno de otro, como íbamos creciendo”. En sus años mozos vendió plantas y programas hípicos, en los años en los que al hipódromo de Agua
Caliente acudían miles de norteamericanos que llegaban en sus autos e inundaban luego el centro de la ciudad, la avenida Revolución.
“Conocí a mi esposa a los 27 años de edad, tenemos 45 años de casados, con 4 hijos. Mi esposa ha sido pilar e inspiración en mis proyectos y empresas, siempre muy acertada”, dice en tono respetuoso.
La colonia Libertad, recuerda, “…era famosa por los ´chucos´, las pandillas que lidiaban con otras de la ´línea´ o de ´la 20´ (colonia 20 de noviembre, en la Delegación Municipal La Mesa), pero al final, todo pasaba. Íbamos solos a la escuela, era diferente, todo era diferente”.
Sus materias preferidas, dice, “…eran las matemáticas, las ciencias. Mi padre me orientaba… quería un hijo doctor, a mí no se me dio. A mí me enfocó en las ingenierías, siempre teniendo mis manos ocupadas.
Mi padre murió cuando yo tenía 22 años. Nunca lo olvido. Siempre lo recuerdo con mucho cariño…”
Enseguida tocó el tema de su desempeño empresarial en la región Tijuana-San Diego: “¿En cuanto a las empresas comunicación? Fue azar del destino. A mi padre le preocupaba que fuéramos buenos ciudadanos. Yo aprendí mucho con el periódico Baja California… pero se dio un proceso de digitalización y hubo necesidad de buscar nuevas alternativas”.
“…La vida es de oportunidades y, a través de participar con eventos sociales, sentí que debía buscar la manera de no darle todo a la gente, pero sí la oportunidad de superarse, de ver por sí misma, de trabajar y obtener sus propias ingresos. Sentía una gran satisfacción ayudar a paisanos…”, refiere.
Toca otro tema que le han criticado cada vez que hay elecciones en las que participa el hoy candidato a la gubernatura por la coalición “Juntos Haremos Historia en Baja California”: “Siendo director del agua por 12 años (en el Distrito de Agua de San Diego), ayudé a mis paisanos, a los marginados y logramos mayor eficiencia en la distribución del vital líquido en esa región”.
En cuanto a cómo tuvo su primer acercamiento con el ex jefe de Gobierno del Distrito Federal y hoy primer mandatario Andrés Manuel López Obrador, el candidato Bonilla Valdez fue claro y sin rodeos:
“…Conocí en ese entonces a José María Pérez Gay, a través de quien tuve el honor de conocer a Andrés Manuel López Obrador, en el año 2000. Pérez Gay colaboraba en la revista ´Panorama´ y me lo presentó. Otros se quieren colgar la medallita, de que me abrieron la puerta para conocer a López Obrador. Desde entonces lo conocí y siempre he creído en sus ideales, y sus proyectos”.
Calificó a López Obrador como el Presidente más legítimo en el mundo, con una votación de más de 30 millones de mexicanos. “Ha estado cambiando la imagen de México a nivel mundial, recuperando el prestigio como nación”, dijo.
Sobre su candidatura a la gubernatura de Baja California, Bonilla Valdez considera que “…es una coyuntura que se da y la tienes que aprovechar. Tú sientes la atracción del gobierno. No puedes decir que no, aun cuando hay un plan de vida. Pero si realmente puedes dar el cambio, acabar con la corrupción, le entras…”.
Habló además de sus 100 propuestas para el Gobierno estatal que aspira encabezar, luego de obtener el triunfo electoral el domingo 1 de junio entrante. “…Algunas más urgentes que otras. Tenemos un estado convulsionado y debemos sacar al buey de la barranca. Un estado crecido, pero no desarrollado. Eso buscamos detonar, el desarrollo… la meta es cambiar el estado. Atacar con un gobierno diferente, la inseguridad. Vamos a tocar puertas para decirle a la gente lo que se puede hacer. Mucha gente no creyó en nuestras propuestas como bajar el IVA, el ISR y el aumento al doble al salario mínimo, y ahora están viendo que son realidades…”.
